Sara Hormigo
EditoraEn la actualidad estamos acostumbrados a ver cómo las mujeres salimos a trabajar en igualdad de condiciones que los hombres, o al menos, esto ocurre en la teoría porque en la práctica hay muchos matices, pero bueno, este es otro tema.
La cuestión es que, desde hace décadas, nuestras abuelas y nuestras madres (aunque en menor proporción) fueron amas de casa. Esto las excluía automáticamente de que su trabajo se viera recompensado como cualquier trabajo normal y, por tanto, de poder cotizar a la Seguridad Social y tener una jubilación digna. Esto es así porque el trabajo doméstico nunca ha sido reconocido de forma legal y por tanto tampoco remunerado.
Sin embargo, desde hace unos años, el sistema público reconoció esta realidad social y en la actualidad, las amas de casa pueden acogerse a una pensión no contributiva de jubilación, las cuales son gestionadas por el Imserso.
Estas no son más que una pequeña red de seguridad para quienes llegan a la vejez sin tener ningún derecho a una pensión contributiva. Y, con esto se permite que estas personas que han dedicado su vida al hogar y a cuidar de sus hijos o familiares sin haber cotizado nada, puedan tener unos ingresos mínimos garantizados.
Los requisitos para poder acceder a la pensión para amas de casa
Los requisitos que deben cumplir las personas que quieran acceder a una de estas pensiones no contributivas, que popularmente se conocen como “para amas de casa”, pero que en realidad pueden acoger a cualquier persona que esté en las mismas circunstancias, son los siguientes:
- Tener al menos 65 años y haber residido en España durante 10 años, de los cuales dos deben ser consecutivos e inmediatamente anteriores a la solicitud.
- Las pensiones no contributivas no pueden combinarse con otras ayudas no contributivas ni con una pensión contributiva.
- Los ingresos anuales en el año 2025 no deberían superar los 7.905,80 euros y también hay una serie de límites impuestos por la Seguridad Social para aquellos que conviven con familiares.
Fuente Imserso
Cuánto cobrarán de pensión las amas de casa en 2026
La cuantía anual de las pensiones no contributivas se actualiza cada año con la Ley de Presupuestos Generales del Estado. En 2025 la cantidad que se fijó para este tipo de pensiones fue de 7.905,80 euros anuales, como decíamos, lo que equivale a unos 564,70 euros mensuales que se cobran en 14 pagas (12 mensuales más dos pagas extra).
Por el momento, y según analistas financieros y expertos en este campo la cuantía de las pensiones no contributivas, incluida la de jubilación, continuará aumentando con el objetivo de acercarse de forma progresiva a la cifra establecida como umbral de pobreza (965 euros mensuales) y mantener el poder adquisitivo de los pensionistas.
Según publicaba la Seguridad Social hace pocos días, parece que "las pensiones contributivas se revalorizarán en 2026 en torno a un 2,7%, de acuerdo con el Índice de Precios al Consumo (IPC) medio interanual". Es decir, unos 35 euros más de media al mes. Además, existe una medida importante que afecta especialmente a las mujeres pensionistas es el complemento para la reducción de la brecha de género. En 2026, este complemento aumentará un 5%, quedando en torno a 35,90 euros mensuales.
Pero todavía tendremos que esperar unos días hasta que el Gobierno confirme cuál será la subida de las pensiones no contributivas que se prevé que sea más del 2,7%, tal como establece la ley para contribuir a que todos los pensionistas se alejen del umbral de la pobreza, como decíamos.
Fotos | Documerica y Josue Michel de Unsplash, Imserso
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