Los actores de Élite levantan pasiones en cada temporada y Las Encinas debe ser el instituto con más personas esterotípicamente guapas por metro cuadrado del mundo. ¿No puedes estudiar allí si no encajas en el cánon de belleza normativo? Al parecer no, o eso afirma el cocreador de la serie.
La serie de Netflix no brilla por su representación diversa de cuerpos. Todos los personajes de Élite cuentan con cuerpos muy normativos, algo que chirría mucho con el movimiento body-positive y que uno de los creadores de la serie ha justificado en una entrevista con Fotogramas:
"Yo te diría que los cuerpos de ‘Élite’ no son normativos. Son lo contrario. Son cuerpos a los que aspiramos, ya sea para parecernos a ellos o para acostarnos con ellos. ¿Cuáles son las razones de mostrar estos cuerpos y no los de verdad? Pues los mismos de estar contando una élite española que tampoco existe. Es una estilización, una idealización. Igual que muestro piscinas y casas de ensueño, muestro también cuerpos de ensueño."
Carlos Montero, creador de esta serie, afirma que el casting está totalmente orientado a ser "aspiracional", como lo son las mansiones, la ropa o las localizaciones. Pero va más allá, poniendo en duda el poder de personajes como el de Kat (Barbie Ferreira) en Euphoria para romper estereotipos:
"Fíjate que me parece un tanto ingenuo esto. Es darle a la ficción un poder que tal vez tenga pero en muy pequeña medida. Dudo que yo posea la capacidad de decirle a un gordo que es sexy. Se lo puedo decir, pero ya que se lo crea... Pero oye, a lo mejor es cuestión de probar. No me cierro a nada."
No podíamos estar más en desacuerdo. No solo Barbie Ferreira nos parece una diosa. También opinamos que darle a un cuerpo normativo el mismo valor aspiracional que a vivir en un lugar bonito continúa un cánon de belleza frustrante y anticuado, idealiza un solo tipo de cuerpo frente al resto y alimenta la cultura la dieta. Algo que, si nos preguntan, nos parece muy 2003 y nada 2022.
Fotos | Élite.