Anabel Palomares
EditorEl otoño es la época para revisionar ‘Las chicas Gilmore’, tomar pumpkin spice latte y ver llover a través de la ventana mientras estás arropada con una manta en el sofá. Pero más allá de ser la estación más romantizada del año, es también el mejor momento para disfrutar de una verdura versátil y llena de beneficios: la calabaza.
Esta verdura baja en calorías y con un alto contenido de agua, es una gran fuente de fibra dietética que favorece la digestión y ralentiza la absorción de azúcares. Rica en carotenoides, especialmente beta-caroteno, con ella conseguiremos un buen aporte de vitaminas como la vitamina C y minerales como el potasio, el magnesio, el fósforo, el calcio o el zinc. Su alto aporte de fibra ayuda al tránsito intestinal y contribuye a la sensación de saciedad, lo que nos puede ayudar en el control del peso.
En esta ocasión, la calabaza se convierte en protagonista indiscutible en un plato de pasta tan cremoso, que nada tiene que envidiar a la clásica carbonara y que ha compartido la creadora de contenido Gloria Carrión, con más de un millón de seguidores en Instagram. Para ella es una de sus recetas favoritas del otoño y forma parte de su repertorio año tras año. No es de extrañar porque está buenísima, es tremendamente fácil y una forma estupenda de incluir esta verdura en nuestra dieta.
Comenzamos picando la cebolla y el ajo. No hace falta que sea muy fino, porque luego vamos a triturarlo todo, así que no perderás mucho tiempo en picar todo. En una cacerola echamos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y rehogamos la cebolla y el ajo con un poco de sal hasta que transparente.
Mientras, con ayuda de un pelador, pelamos la calabaza y la cortamos en dados de un centímetro para reducir el tiempo de cocinado y cuando la cebolla esté transparente, añadimos la calabaza para que se rehogue todo junto. De esta forma potenciaremos su sabor. Cuando haya rehogado, vamos a añadir las especias rehogando unos segundos más para que suelten el aroma, y después el caldo de verduras (si es casero mucho mejor) y la leche de coco, que le va a aportar una cremosidad extra.
Un truco: si quieres que se convierta en una receta antiinflamatoria, añade cúrcurma junto con el resto de especias como nos recomendaba la nutricionista Blanca Martin en esta crema de calabaza.
Dejamos cocer todo a fuego bajo y tapado hasta que la calabaza esté tierna, tiempo que aprovecharemos para ir cociendo la pasta siguiendo las instrucciones del fabricante pero restándole un minuto para que termine de hacerse en la salsa. Si hemos cortado la calabaza en trozos pequeños, con 12-15 minutos que cueza será más que suficiente para que esté blandita y podamos triturar.
Cuando a la pasta le quede un minuto para estar lista, la sacamos y añadimos a la crema de calabaza junto con un poquito del agua de cocción para que el almidón de la pasta nos aporte más cremosidad. Dejamos que se termine de hacer en la salsa y añadimos un buen parmesano. Ya tienes una cena o comida perfecta para cualquier día de la semana si le añades un aporte de proteínas para que sea completa.
Fotos | TikTok @lagloriavega
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