A sus 32 años, Blake Lively ha pasado (y se ha recuperado) de tres embarazos, con sus respectivos partos. Su última hija con Ryan Reynolds nacía en agosto del año pasado y, con fuerza de voluntad y la ayuda de su entrenador personal, Don saladino (el mismo que puso en forma al marido de la actriz para la película Deadpool y en cuya cartera de clientes también se encuentra Scarlett Johansson) ha perdido 27 kilos.
Para ello, Lively entrenó entre cuatro y cinco veces a la semana de forma moderada. Algunos días durante una hora, mientras que otros, por su apretada agenda, el entrenamiento se limitó a 20 o 30 minutos.
¿Cardio o entrenamiento de fuerza?
La rutina comenzaba con diez minutos de calentamiento o activación dinámica durante los que el entrenador se encargó de realizar un trabajo correctivo para que el cuerpo de la actriz se moviera de forma correcta, ya que las mujeres que acaban de ser mamás pueden tener ciertas asimetrías resultantes de sujetar a los bebés.
Después del calentamiento, llegaba el entrenamiento de fuerza, que ofreció los mejores resultados a la hora que quemar grasa. Aunque el cardio también fue importante para ello, tuvo un protagonismo mucho menor, reservándolo para el final del entrenamiento, y dependiendo del estado en el que se encontrara Blake.
Lo cierto es que la actriz hacía cardio de alta intensidad o moderado, aunque esta que fue la opción por la que optaron la mayoría de las veces ya que, según este profesional del deporte, hacer pasar a una madre por el estrés de un entrenamiento de alta intensidad es "una irresponsabilidad".
Los mejores ejercicios para el tren superior y el tren inferior
Para trabajar el tren superior, Blake empezaba con un calentamiento con un foam roller, que seguía con ejercicios de movilidad dinámica, como tres y cuatro series de entre ocho y diez repeticiones haciendo el puente mientras se eleva una pierna.
Más tarde, la actriz hacía diez ejercicios en los que los saltos eran la clave, como star jumps, seguidos de 10 lanzamientos de balón medicinal y otros ejercicios de levantamiento de peso, como levantamiento de sacos búlgaros.
Para el tren inferior, tras el calentamiento, los saltos, lanzamientos y levantamientos de peso, el trabajo se centró en ejercicios con peso muerto con pesas rusas, zancadas laterales y sentadillas durante 3 ó 4 series de 8 a 10 repeticiones.
Eso sí, para trabajar core y abdominales, la actriz realizó también elevaciones laterales con cable apoyada sobre una rodilla. Para realizar este ejercicio correctamente, se centraba en apretar los glúteos y evitaba arquear la espalda. Realizaba tres series de diez repeticiones en cada lado.
Para cada circuito, Lively realizaba tres rondas y terminaba con 20 ó 30 minutos en la elíptica, en la cinta o en la escaladora para el cardio. Aunque, algunos días, lo cambiaba por ejercicios interválicos en la piscina y natación durante media hora. Incluso iba al rocódromo a hacer escalada.
Fotos | Instagram de Blake Lively.
Ver 1 comentarios