En cualquier visita a la bella Zaragoza es imprescindible entrar al Palacio de la Aljafería, la Basílica del Pilar, la Catedral del Salvador de Zaragoza o la Plaza del Pilar. Pero más allá de los clásicos, existen otros rincones que escapan a las guías turísticas tradicionales y sorprenden a cualquier visitante. Además, más allá de sus grandes monumentos, también podemos encontrar una oferta gastronómica estupenda donde si queréis ir de pinchos y tapeo encontraréis un montón de lugares. No obstante, ¿qué hacemos si llueve durante nuestra visita a la ciudad del Pilar? Pues también hay opciones.
Acuario de Zaragoza
Se trata del acuario de agua dulce más grande de Europa, con más de 350 especies distintas de los cinco ríos representados: Nilo, Mekong, Amazonas, Murray-Darling y el Ebro. Así que tiene tiene especies que se salen de lo habitual de otros acuarios: peces, galápagos, reptiles, ranas, siluros, tiburones, cocodrilos, nutrias, titis... Te sorprenderán los arapaimas de casi 4 metros y 200 kg. Situado en uno de los tres pabellones temáticos de la Expo 2008, su tanque central simboliza el Gran Río Mundo, tiene 9 metros de profundidad, más de 45 metros de longitud, entre 8 y 9 metros de ancho y casi 2 millones de litros de agua. También realizan bautizos de buceo, snorkel e inmersiones guiadas.
Emoz
Primer Museo de Origami de Europa y único en España está en Zaragoza. Un museo único, distinto y sorprendente, con los mejores artistas del plegado del papel. La amistad de la insitución con grandes plegadores: Akira Yoshizawa, Yoshihide Momotani, Eric Joisel, Vicent Floderer y tantos otros ha permitido agrupar en un único lugar el mejor conjunto de obras de origami del mundo. Además, esta Escuela-Museo se encuentra en el piso superior del Centro de Historias, un edificio de fachada barroca y con torre campanario de principios del siglo XVIII. Entre sus paredes se organizan actividades y cursos para socios y aficionados al arte de la papiroflexia.
Museo Goya Colección Ibercaja
Situado en el Palacio de los Pardo, este museo es el único lugar del mundo que expone de forma permanente la colección completa de grabados: Los Caprichos, Los Desastres de la Guerra, La Tauromaquia, Los Disparates y Los Toros de Burdeos, realizada esta última con setenta y nueve años de edad. En total, esta casa palaciega renacentista sede del museo, también llamada Casa Aguilar, expone catorce pinturas, un dibujo y las cinco grandes series que Goya grabó. Además se encuentran obras de autores anteriores coetáneos y posteriores al artista a los que sirvió de inspiración.
Mercado Central
Ubicado en el centro de Zaragoza, el Mercado Central de Zaragoza, también llamado Mercado de Lanuza, se construyó entre 1895 y 1903. Además, es Monumento Nacional desde 1978 y Bien de Interés Cultural desde 1982. Diseñado a principios del siglo XX y reformado hace pocos años, es uno de los espacios más emblemáticos de la ciudad. Un lugar en el que los locales no solo acuden a hacer la compra sino que es un reclamo turístico y gastronómico que merece la pena visitar.
Museo Pablo Serrano
Los amantes del arte y la cultura contemporánea no pueden perderse este museo. El edificio en sí es un buen ejemplo de arquitectura industrial aragonesa, en el que se encontraban los talleres de carpintería y otros oficios del Antiguo Hogar Pignatelli. En un principio, se concibió como museo monográfico que expusiera la obra de Pablo Serrano, pero finalmente se convirtió en el Instituto Aragonés de Arte y cultura Contemporáneos, que alberga una buena muestra de la obra del que es considerado uno de los artistas nacionales más importantes del siglo XX. Entre sus fondos se encuentran obras de Arroyo, Barceló, Saura, Picasso, Miró o Tàpies, y de artistas internaciones como Michaux, Warhol, Lichtenstein, Beuys, Bacon o Le Corbusier.
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