Si eres de las que se mantiene firme en la idea de "no soy persona hasta que me tomo el café", estás de suerte, eso es que la cafeína te sigue haciendo efecto. Si por el contrario sientes que tras tu primera taza de café tu cuerpo parece no inmutarse, puede que estés desarrollando cierta tolerancia a la cafeína. Y no, esto no es cuestión de aumentar las dosis de nuestros cafés, porque la calve está en no sobrepasar las recomendaciones de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, donde se indica que lo seguro sería consumir hasta 200 mg de cafeína en una única dosis y 400 mg a lo largo de todo el día. Es decir, entre 3 y 4 tazas de café cafeinado de máximo en adultos. Pero, ¿y qué hago si esto ya no me despierta?
David Calleja, médico y anestesista ha compartido en redes un vídeo en el que explica por qué nuestro cuerpo se adapta a la cafeína y qué podemos hacer para evitar dicha resistencia. Para ello señala un curioso método que denomina "descarga de cafeína" y cómo podría ayudarnos a conseguir que el café nos despierte de nuevo.
¿Por qué desarrollamos resistencia a la cafeína?
"En el cerebro tenemos una molécula que es la adenosina, cuando estamos cansados el cuerpo libera adenosina, que se unirá a unos receptores que están en el cerebro y nos entrará la sensación de cansancio. La cafeína lo que va a hacer es unirse a esos mismos receptores, impidiendo que se una la propia adenosina y al no unirse a su receptor no aparece la sensación de cansancio. Lo que pasa es que el cerebro no es tonto y lo que hará será sacar más receptores de adenosina. Al tener más receptores, la cafeína no va a poder bloquear todos, esto hará que nos hagamos tolerantes a la cafeína," ha explicado el experto
Entonces, ¿cuál es el truco para conseguir que el café nos ayude a combatir el sueño por las mañanas? El médico lo tiene claro: una descarga de cafeína. "Dejar de consumir cafeína durante unos días. Al hacer esto el cerebro guardará los receptores de cafeína extra y el café nos volverá a hacer efecto", revela el médico. Desde Vitónica, los expertos también insisten en ello, apostando por un protocolo de abstinencia de 7 días para recuperar la sensibilidad a la cafeína y conseguir que este estimulante nos vuelva a hacer efecto.
Sabemos que estar una semana renunciando la bebida que nos acompaña mañana tras mañana puede hacerse un tanto cuesta arriba, para ello podemos optar por café descafeinado. Una opción que nos traslada de llenos al sabor del café pero que es perfecto para estar unos días sin consumir cafeína. Toma nota y haz prueba de este experimento.
Fotos | Mikhail Nilov en Pexels
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