El trabajo en remoto o teletrabajo ha empezado a coger fuerza y hacerse mayoritario durante los últimos meses por causa de la COVID. Mientras que algunos de nosotros llevamos años trabajando de esta manera, muchas de las personas que se han incorporado al mercado laboral estos meses lo han hecho teletrabajando.
Si este es el caso, es más que probable que te des cuenta de que cuesta algo más relacionarte con tus nuevos compañeros, llegar a conocerlos y ya ni hablemos sobre hacer amigos o una relación algo más profunda. Por suerte, hay algunas cosas que podemos hacer para tener una relación lo más similar a la que podríamos tener si trabajáramos juntos en una oficina.
Por qué es bueno tener una relación de amistad en el trabajo
Los expertos de software de recursos humanos Bizneo HR realizaron el año pasado un análisis sobre el efecto que tiene en la productividad laboral el hecho de tener amigos en el trabajo.
Lo que encontraron fue que los equipos de trabajo que estaban formados por amigos eran alrededor de un 12% más productivos en comparación con aquellos equipos que estaban formados por personas sin especial afinidad entre ellos.
No solo ayuda a que nos sintamos más implicados en el trabajo, si no que nos ayuda a trabajar nuestras emociones más rápidos - permitiéndonos desahogarnos con personas que entienden por lo que estamos pasando - y mejora la comunicación, reduce el estrés y mejora lo que conocemos como competitividad sana o positiva.
Cómo crear una relación con tus compañeros de trabajo cuando teletrabajas
Utiliza las herramientas a tu alcance para mostrar quien eres
Cuando trabajamos en remoto no siempre es fácil el simple hecho de presentarnos a nuestros compañeros, así que ya ni hablemos de darnos a conocer. Y sin que conozcan quienes somos, es difícil llegar a tener una amistad con ellos.
Esto significa que tendremos que hacer algunos esfuerzos mayores de lo habitual. Usar las herramientas que estén a nuestro alcance, como Slack, o Hangouts, el email o cualquier otro medio que nuestra empresa utilice, de manera activa nos ayudará. Introducirnos en conversaciones, opinar sobre los temas de los que se esté hablando, etc., puede ser de gran ayuda.
Ten pequeños gestos de amabilidad
¿Sabes como en la oficina siempre hay alguien que recuerda los cumpleaños de todos, que lleva cafés a los demás para desayunar o que compra pastelitos para celebrar cosas? Trabajando en remoto no podemos hacer esas cosas, pero sí podemos tener gestos de amabilidad y deferencia hacia nuestros compañeros.
Y no es solo por quedar bien o porque nos hagan sentir felices con nosotros mismos, si no porque los estudios encuentran que los actos amables inesperados pueden mejorar el estado de ánimo de los demás y ayudar a confraternizar. Cosas tan pequeñas como felicitar a los demás por sus logros, recordar los cumpleaños, ofrecerte a ayudar en alguna tarea que a alguien le resulte compleja, o decirle a alguien a quien admiras que admiras su trabajo, puede suponer un cambio enorme en tus relaciones laborales.
Acude a las reuniones físicas o a la oficina ocasionalmente
En esta época de COVID es un poco más complejo, pero cuando por fin sea posible, acudir de vez en cuando a la oficina o participar en las reuniones físicas de tu empresa es importante. Ponerle cara a la gente, permitir que vean como miras, como sonríes y hacer lo mismo con ellos, ayudará a crear cercanía e intimidad. Además, en estas reuniones suele haber un rato para las conversaciones distendidas. Reírnos y pasarlo bien con otras personas son una manera excelente de crear un vínculo.
Manten tu canal abierto y préstale atención
Una investigación de la Universidad de Harvard encuentra que los trabajadores en remoto suelen encontrar una barrera para establecer relaciones personales con sus compañeros. Y para superar esa barrera necesitaban crear lo que estos investigadores llaman "cadencia". Básicamente se trata de la percepción que tienen los trabajadores de conocer quien es como persona su compañero y poder predecir como van a interactuar entre ellos.
Por eso, según indican estos investigadores, no solo es importante darnos a conocer a las otras personas, si no también mostrar como somos en relación con ellos. Cosas tan simples como tener el canal en el que solamos hablar abierto, prestarle atención a menudo para darnos cuenta de si nos hablan directamente, contestar en un tiempo razonable y demostrar ser un compañero de trabajo confiable, puede abrirnos las puertas a una amistad fuera del trabajo.
Entra un poco antes en las videollamadas
Es posible que tus compañeros de trabajo se conozcan ya, se hayan visto en persona alguna vez, tengan relaciones personales, etc. Esto es algo que podemos aprovechar. Y es que, en las reuniones laborales, incluso en las virtuales, es habitual que las personas que se conocen dediquen unos minutos a hablar entre ellos de cosas no relacionadas con el trabajo. Por ello, puede ser una buena idea entrar un poco antes de la hora en las reuniones y aprovechar para hablar con nuestros compañeros.
Comparte cosas personales o situaciones graciosas
Esto no nos saldrá de primeras, pero cuando hayamos hecho todo lo anterior, si percibimos que alguno de nuestros compañeros está más receptivo, si notamos una conexión particular con una persona o percibimos cierta disposición a la amistad, podemos lanzarnos a hablar con esa persona sobre algo no relacionado con el trabajo. Ya sea contarle algo personal, hacer una broma sobre algo que te haya ocurrido estos días, etc. Algo que empieza a abrir el camino de compañeros de trabajo a amigos.
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