El 2020 ha sido un año duro para la industria de la moda, aunque eso no ha impedido que Inditex y Amancio Ortega sean dos de los grandes protagonistas solidarios de esta pandemia. Y, a pesar de los cierres de tiendas, la compañía gallega ha mantenido el compromiso con sus empleados de evitar ERTES y despidos. Un gesto que los empleados quisieron agradecer a Amancio Ortega en directo y terminó haciendo llorar al multimillonario, abrazado a su hija.
El jueves pasado Inditex organizó su fiesta del amigo invisible anual, donde los empleados intercambiaron jerséis navideños y mascarillas comprados por la empresa. Amancio Ortega salió a saludar a sus empleados junto a su hija Marta Ortega. Ellos le recibieron entre vítores y aplausos, todos ellos ataviados con sus recién adquiridas prendas festivas. Un gesto que emocionó al magnate, haciéndole echar una lagrimita.
Las emociones en la sede de Arteixo (A Coruña) están a flor de piel, después de cerrar 2020 que Pablo Isla compartiera un mensaje de agradecimiento y ánimo para toda la plantilla: "Vamos a salir de esta más fuertes y más unidos que nunca como empresa." Un comunicado lleno de esperanza que llega después de saber que la facturación de la compañía cayó un 26% en este año.
Esta no es la primera vez que Amancio Ortega rompe a llorar ante el cariño de sus empleados. Pero esta imagen, junto a su hija y ambos ataviados con mascarilla, quedará en el recuerdo agridulce de este año tan complicado. Y es que, a sus ya 84 años de edad, el multimillonario ha estado al pie del cañón de su empresa este 2020 más que nunca. Donaciones, compromisos contra los despidos y mucha inversión en sanidad que se han traducido en todo el cariño de los trabajadores.
Fotos | Gtres.
