Los reclutadores tienen el consejo perfecto para triunfar en una entrevista de trabajo: hablar menos

La llamada “inflación de respuestas” está cansando a los reclutadores y sepultando oportunidades laborales

Mina Rad Fawfieh096e Unsplash
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
joel-calata

Joel Calata

Editor

En muchas entrevistas de trabajo ocurre algo que, aunque viene de una buena intención, los candidatos piensan que hablar sin parar demuestra entusiasmo y entrega, sin embargo al final termina siendo justo lo contrario: una señal roja para los reclutadores.

Este fenómeno denominado "answer inflation" (inflación de respuestas) se genera cuando el candidato a un puesto responde con una avalancha de datos, roles anteriores, logros y detalles irrelevantes en lugar de ser claro y directo.

La razón por la que muchos candidatos caen en esta trampa es comprensible: quieren demostrar que tienen mucho que aportar, que han hecho mucho a lo largo de sus carreras, que pueden con todo. Pero lo que ocurre es que, al extenderse demasiado, acaban diluyendo lo que realmente importa: por qué ellos son la persona que el entrevistador debería fichar ahora mismo. 

Como explica Marc Cenedella, CEO de la plataforma de empleo The Ladders, en un artículo de Fast Company: "Cuando te hacen una pregunta abierta, ¿te arriesgas a responder con reflexión? ¿O divagas, sorprendido?" 

Esa indecisión, ese hablar sin filtro ni pausa, genera en el entrevistador la impresión de que el candidato no sabe priorizar, no sabe juntar una historia coherente ni se ha preparado para articular su valor agregado.

Para el reclutador, esto es problemático por varias razones. Primero, porque la entrevista es limitada en tiempo y debe entregar información clave. Si el candidato se va por las ramas, la conversación pierde foco y el reclutador no puede obtener lo que necesita.

Segundo, cuando un candidato se extiende demasiado sin pausa, se transmite falta de autocontrol: ¿si no sabe cuándo parar al presentarse, cómo va a saber cuándo parar al hablar de problemas o avances en el trabajo? Además, en un momento en que los equipos tienen prisa por fichar, una persona que no sabe dar lo esencial de una conversación puede ser percibida como un riesgo.

¿Cómo se traduce esto en la práctica? Ante preguntas como "Cuéntame sobre ti", lo mejor no es detallar toda tu trayectoria desde primero de carrera, sino seleccionar 2 o 3 ejemplos concretos y relevantes que demuestren impacto real, acompañados de cifras o resultados claros.

Para los candidatos, la clave está en cambiar la mentalidad: menos es más. No se trata de contener la emoción ni de parecer frío, sino de ir directo al grano, con claridad, sin redundancias. Antes de la entrevista conviene reflexionar sobre qué tres logros están mejor alineados con la vacante, qué problema concreto de la empresa puedes ayudar a resolver y cómo articularlo en una respuesta breve.

Si al responder empiezas a sentir que estás dando rodeos, es buen momento para hacer una pausa, respirar y redirigir hacia un punto concreto., porque hablar sin parar no demuestra pasión, demuestra que no se ha preparado la entrevista y que no se ha reflexionado sobre lo que realmente importa para la empresa. Y eso, para los reclutadores, es más un motivo de alerta que un motivo de entusiasmo.

Foto de Mina Rad en Unsplash

En Trendencias | Cada vez más los trabajadores se aferran a su trabajo, pero no porque les guste, sino porque tienen miedo al cambio: así es el fenómeno del Jub Hugging

En Trendencias | Si te provocan en el trabajo, la mejor forma de afrontarlo es aplicar tres simples pasos que demostrarán que eres más inteligente

Inicio