Los nacidos entre 1950 y 1970 parten con ventaja emocional y psicológica frente a otras generaciones: están llegando a su "peak"

Asociar el envejecimiento al desgaste físico, a volverse un gruñón o estar desfasado podríamos catalogarlo como edadismo o, también como un “cliché” propio de las personas mayores, pero los expertos dicen que a nivel intrínseco es todo lo contrario, y lo definen como un proceso de “afinamiento emocional”. 

Esto es así debido a que existen varios estudios que señalan que entre los 60 y los 70 años muchas personas alcanzan el mejor momento de su vida a nivel emocional y de equilibrio mental, su "peak".

El momento cumbre de bienestar vital está entre los 60 y 70 años

Podríamos definirlo como un pico de bienestar emocional y social, en el que están implicados los considerados "los cinco grandes rasgos de la personalidad" según la teoría del Big Five (sociabilidad, responsabilidad, apertura, amabilidad y neuroticismo), tal y como explican en Xataka, y que los psicólogos dicen que tienden a mejorar con la edad. 

Por lo que, gracias a esto, según nos vamos haciendo mayores somos capaces de tomar mejores decisiones, o al menos estas son más reflexivas y calmadas.

Las áreas donde se encuentra una evolución más positiva son: la conciencia, puesto que parece ser que somos más responsables, la estabilidad emocional, donde el neuroticismo se reduce considerablemente y la tranquilidad, estando en un momento de mayor calma, y que, además, aumenta nuestra amabilidad.

Nuestros mayores son más felices ahora que en generaciones anteriores

A esto hay que sumarle otras investigaciones en la misma línea en las que se estudió la satisfacción y síntomas depresivos y en las cuáles se encontró que en los adultos mayores de hoy en día se tienden a reportar menos síntomas negativos y una mayor satisfacción vital que en generaciones anteriores de la misma edad, en este caso estaríamos hablando de personas nacidas en los años 1946 y 1964.

Pero es que también, a esto hay que añadir que un estudio sobre las diferencias de cohorte en los Big Five detectó que los nacidos en la generación del Baby Boom tienen una mayor extraversión y la mente mucho más abierta de los que tenían sus padres a la misma edad.

La gran brecha generacional: más dependencia emocional, menos independencia vital

Por el contrario, parece que a las generaciones más jóvenes les pasa lo contrario, y aquellos pertenecientes a la generación Z así como los Millenials presentan niveles más altos de estrés y ansiedad en comparación a generaciones anteriores. Según los últimos informes de Sapien Labs sobre el Mental State of the World, se muestra la gran brecha existente a favor de los mayores, que tienen una mayor autoestima y dependen menos de la validación externa. 

Toda la información de la que disponemos hoy en día, a través de las redes sociales fundamentalmente, ha influido en hacer que nuestros mayores sean más independientes. Saber que tenemos que cuidarnos tanto a nivel físico como mental, nos abre las puertas a ser más resilientes y saber adaptarse a "los nuevos tiempos". Por eso, otros estudios también dicen que los mayores de 70 son más independientes y autónomos gracias al envejecimiento activo, lo que también les protege a nivel psicológico y mental del deterioro cognitivo y la demencia.

Por último, tenemos que hablar del concepto de “sabiduría personal”. Según los psicólogos se trata de los valores emocionales que se han aprendido a lo largo de la vida, y que también parece alcanzar su punto álgido en la vejez más tardía. Dentro de esta sabiduría cabe mencionar como parte de ella la gestión de conflictos sociales y emocionales, que es mejor con los años, y es que la experiencia y la madurez también tienen mucho que ver en esto. 

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