Nacho Viñau
EditorJulia Linn Olson @dolphinine es una mujer todo terreno que tras llevar una vida luchando contra enfermedades crónicas, comenzó a entrenar fuerza a los 62 años. Y entonces se dio cuenta de todo el potencial que podía desarrollar, tal y como cuenta en sus redes. No solo vivió un cambió físico en su cuerpo, también vivió un cambio mental que le hace sentirse orgullosa y capaz.
Una vida combatiendo enfermedades crónicas
Esta mujer que es todo un ejemplo de superación explica que de niña siempre fue atlética, que le encantaba nadar, ser animadora y correr en pista. Pero a los 11 años esa vida se truncó, ya que le diagnosticaron diabetes y desarrolló neuropatía, ceguera, enfermedades cardiacas y problemas renales. Estas afecciones provocaron que se complicara hacer ejercicio, ya que tenía que entrar y salir continuamente del hospital.
Julia Linn Olson cuenta que en esos momentos hacía todo lo que podía para cuidarse, pero nada funcionaba. Y eso "era desmoralizador porque su cuerpo no respondía". A los 34 años el problema se agravó cuando sus riñones fallaron, teniendo que someterse a un doble trasplante experimental de órganos para conseguir un nuevo riñón y un nuevo páncreas y curar potencialmente la diabetes.
Aunque la operación era arriesgada, fue todo un éxito. Aún así, a los 40 años avanzó su cardiopatía y tenía una tiroides disfuncional. Entonces, se sometió a un triple bypass cardíaco y le extirparon el tiroides. Así llegó a los 62 años, agradecida por estar viva. Y fue en ese momento cuando en algo en su cabeza hizo clic y decidió ponerse lo más en forma posible.
@dolphinine
El cambio vino a los 62 años
Pasados los 60, y mientras vivía en México, se encontró con un reto de fuerza on line de tres meses de duración para personas mayores de 40 años. El objetivo de ese reto era levantar pesas y mejorar la nutrición. Nunca había levantado pesas, pero Julia reconoce que se enganchó. Y al pasar los tres meses, era la persona que más había progresado en este programa.
En su cuenta de Instagram, esta mujer que hoy está cerca de cumplir los 70 explica que a sus 62 años tomó una "decisión consciente basada en amarme a mí misma. ¡Qué diferencia con empezar con una mente crítica y cruel conmigo misma! No tenía ni idea de la profunda transformación que se produciría al tomar acción y amarme".
@dolphinine
Julia señala que su cuerpo estaba respondiendo al fin a los cuidados que necesitaba. Y lo mejor es que se sentía genial, viéndose capaz de superar nuevos retos. Al cabo de un año volvió a Estados Unidos y allí contrató a un entrenador personal para conseguir un bienestar adecuado, levantando pesos más pesados y aprender más sobre su cuerpo.
Desde entonces, Julia sigue trabajando con el mismo entrenador y hace sesiones de 45 minutos con una rutina dividida en la que un día entrena tren inferior y el otro tren superior
El culturismo fue el siguiente paso
Con el cambio físico y mental, Julia decidió dar un nuevo paso adelante aceptando el reto que le propuso su entrenador: presentarse a un concurso de culturismo. Pese al miedo que sentía por exhibirse a sus 64 años en bikini, decidió participar centrándose en aumentar la masa muscular con pesas y un superávit calórico. El resultado fue que ganó ese campeonato y se enganchó también a esta práctica deportiva.
Entrenar para ese tipo de competiciones se convirtió en el nuevo estilo de vida, y tanto física como personalmente fue creciendo gracias a la disciplina y a la motivación. "Hacer ejercicio y alimentar mi cuerpo con nutrientes saludables se convirtió en algo natural". Además, Julia se siente muy orgullosa porque puede servir de ejemplo a otras mujeres e inspirarlas para que hagan lo mismo.
La dieta también es importante
Junto al deporte, Julia también cuida su alimentación con una dieta equilibrada, algo muy importante teniendo en cuenta los problemas de salud que tiene desde niña. Para llevar la dieta adecuada, usa una aplicación llamada My Macros+ con la que se organiza, haciendo cinco comidas al día.
Da prioridad a las proteínas magras, a los carbohidratos complejos y a las grasas saludables. Además, explica que siempre tiene verduras cortadas en la nevera. Y entre sus platos favoritos figura el salmón, el atún, el pollo, el boniato morado o el yogur griego. Si le apetece postre, se lo toma, ya que afirma que no se priva ni se limita: "Todo es cuestión de equilibrio y yo he encontrado lo que me funciona".
Como resultado de todo ese proceso, Julia ha dejado de pensar en sí misma de una forma negativa, teniendo una confianza total en ella misma. Ahora, después de décadas marcadas por la enfermedad, se siente fuerte, orgullosa y capaz.
En Trendencias | En forma a los 50 y más allá: cuatro ejercicios que te harán sentir como si tuvieras 20
En Trendecias | Andar al menos 7.000 pasos y a ritmo ligero: este es el dato que da la ciencia para envejecer de forma saludable
En Trendencias | La regla 6-6-6 se ha vuelto súper popular entre los seniors para estar en forma. Solo tiene un problema, hay que madrugar mucho
Ver 0 comentarios