Las espinacas se han convertido en la verdura protagonista de infinidad de recetas para esta primavera. Su creciente notoriedad no solo se debe a la variedad de formas que ofrece este producto a la hora de combinarse a la perfección en diferentes platos, ya sea como protagonista de los mismos o como acompañamiento de un principal. Son fáciles de cocinar, ricas y saludables, pero además, la lista de beneficios de las espinacas es tan amplia que invita a hacerles un hueco en tu nevera esta temporada sí o sí.
Lo que convierte a esta verdura en un superalimento es su alto contenido en magnesio y es que la importancia de dicho mineral en nuestra dieta es mayúscula ya que es un básico para mantener los huesos, el corazón y el cerebro en un correcto funcionamiento. Ahí es cuando entran en juego las espinacas, sin duda uno de los alimentos que más magnesio contienen, además de calcio, hierro, potasio y fósforo, así como vitaminas A, C, E y K, entre otras.
La importancia de consumir productos con magnesio se debe precisamente al déficit de este mineral en nuestro organismo. Según indican los resultados del estudio ANIBES, el 80% de la población española presenta consumos de calcio y magnesio menores a los recomendados, algo que no favorece especialmente a las más de 300 reacciones metabólicas en las que participa, de ahí que se vayan manifestando los síntomas comunes relacionados con el déficit de magnesio: fatiga, pesadez muscular o problemas de insomnio.
Beneficios de incluir las espinacas en la dieta
- Son ricas en antioxidantes: según indican los estudios científicos, los fitoquímicos y bioactivos derivados de la espinaca son capaces de prevenir el daño oxidativo macromolecular. En el sistema ocular previenen la pérdida de agudeza visual por degeneración macular. Destaca también su papel de protección de la dermis del daño solar y del envejecimiento.
- Son buenas para la digestión: las espinacas favorecen el bienestar digestivo y contribuyen a la desintoxicación del organismo gracias a que protegen el hígado y el colon.
- Reducen la fatiga: Un estudio científico explica como ampliar el consumo de espinacas puede reducir los síntomas de cansancio.
- Saciantes y bajas en calorías: induce la secrección de hormonas de la saciedad.
¿Cómo incluir las espinacas en nuestro día a día?
Si hay algo que nos gusta especialmente de las espinacas además de su amplia lista de beneficios, es la infinidad de posibilidades que ofrece a la hora de cocinarse. Las ensaladas con base de espinacas son un básico para una cena ligera, combinadas con tomate, aguacate y atún y su correspondiente chorrito de aceite de oliva virgen extra. Otra de nuestras recetas infalibles es la crema de espinacas un must en nuestros menús de otoño e invierno.
Más allá de su papel protagonista en los platos, las espinacas son la guarnición ideal en cualquier comida, combinando tanto con carnes y pescados, sirviendo como acompañamiento en una comida o cena no solo saludable, sino también rica en magnesio, evitando ese déficit del mineral. Una apuesta perfecta para cuidarnos por dentro. Eso sí, no debemos olvidar que en el caso de fatiga crónica, así como sensación recurrente de cansancio no podemos esperar resultados milagrosos tras la ingesta de este alimento, sino acudir a un especialista.
Fotos | Lisa Fotios en Pexels, Eva Bronzini en Pexels
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