No nos cansamos de repetirlo durante los últimos meses, la comodidad ya no es una opción en nuestros looks, es prácticamente una obligación. Lejos quedan ahora los estilismos imposibles que defendían el refrán español "para presumir hay que sufrir". Aunque hace años que la tendencia sporty invade la calle, las semanas de confinamiento en casa han logrado que el chándal sea el combo de moda y que las principales firmas low-cost lancen colecciones comfy para suplir nuestras necesidades.
El teletrabajo se impone por más tiempo, numerosas ciudades piden que sus habitantes salgan a la calle lo mínimo posible y el invierno se acerca (con sus bajas temperaturas), así que los pantalones gustosos para estar en casa son la compra estrella de la temporada, sea en formato diseños de punto o en los clásicos modelos jogger de felpa -o pantalón de chándal de toda la vida-.
Además de para estar confortables en nuestro hogar, los joggers dan mucho rollo a cualquier outfit para pisar la calle con un fin informal. Si buscas un resultado minimalista, opta por los diseños en tonos neutros como el beige o el gris, mientras que si te apasionan los looks a todo color, tienes alternativas en malva, rosa y teñidos de tie-dye.
Pantalón de tiro alto con cintura elástica de Zara. 19,95 euros.
Joggers en mezcla de algodón de H&M. 9,99 euros.
Joggers en mezcla de algodón
Pantalón jogger punto de Bershka. 22,99 euros.
Pantalón jogger felpa de Stradivarius. 12,99 euros.
Joggers de H&M. 19,99 euros.
Joggers
Pantalón básico jogger lila de Pull & Bear. 15,99 euros.
Pantalón jogger bordado de Bershka. 19,99 euros.
Pantalón de tiro alto con cintura elástica de Zara. 15,95 euros.
Pantalón jogger tie-dye de Pull & Bear. 22,99 euros.
Pantalón jogger tie dye de Bershka. 22,99 euros.
Pantalón jogger tie dye de Stradivarius. 19,99 euros.
Foto de portada | @laura_eguizabal
Fotos | Zara, H&M, Bershka, Stradivarius, Pull & Bear
