Hoy es un día triste para la ciencia española, la bioquímica asturiana Margarita Salas ha fallecido este jueves en Madrid a los 80 años de edad. Discípula de Severo Ochoa, a ella le debemos la llegada a España de la investigación en genética molecular a finales de los años 60. Además, su descubrimiento más importante revolucionó la genética, consiguiendo que las pruebas genéticas se extendieran a campos como la medicina forense, la oncología y la arqueología, entre otros.
Se trata de una enzima llamada polimerasa Phi29, que es capaz de producir copias genéticas precisas a partir de una sola gota de sangre. Un descubrimiento que consiguió tras décadas de investigación.
Salas tuvo la oportunidad de estudiar durante tres años en Nueva York, donde trabajó mano a mano con el Premio Nobel Severo Ochoa. El pasado mes de junio, la científica había sido reconocida en Viena por su carrera con el Premio Inventor Europeo 2019, otrogado por la Oficina Europea de Patentes.
Allí también obtuvo el premio Popular de la gala de los inventores europeos, elegido por el público. Con estos galardones, el jurado, además de valorar sus aportaciones al estudio de la genética, también destacó el compromiso de la bioquímica con potenciar la presencia de mujeres en la ciencia.
Salas aprovechó este momento para recordarle al Gobierno que "la ciencia es importante para el desarrollo del país" y lamentar que con la actual financiación no sea posible que vuelvan los investigadores que tuvieron que marchar al extranjero por la crisis económica.
Ella fue también la primera en presidir el Instituto de España, la primera española en ingresar en la Academia de las Ciencias de Estados Unidos y la primera científica en entrar en la Real Academia Española de la Lengua, donde se se encargaba de analizar los términos científicos. Además, obtuvo numerosos premios como el Rey Jaime I de Investigación en 1994 y fue elegida por la Unesco Investigadora Europea en 1999.
No cabe duda de que Margarita Salas, nos deja toda una vida dedicada a la ciencia que es un ejemplo perfecto del trabajo de las mujeres en este campo.
Fotos | Gtres y CSIC.
