¿Quien no ha oído hablar de los relojes de Daniel Wellington? Todo el mundo habla de ellos, y las famosas y bloggeras los lucen con sus outfits diarios. Modelos unisex, cuyas señas de identidad son la sencillez y la elegancia clásica.
Los relojes son una de mis debilidades, y cuando conocí la firma me chifló. Daniel Wellington es una marca de relojería sueca que poco a poco se ha dado a conocer en Europa. Diseños grandes y sobrios con correas de piel o de naylon de colores, ideales para lucir con looks diarios.
Cada uno de los modelos tiene un encanto especial, quizá sea su fina esfera de 6 milímetros, disponible en oro rosa y plata, y sin excesiva ornamentación, el secreto de su éxito. Su aire minimalista y tradicional ha hecho que rostros conocidos como Sara Carbonero, bloggueras y amantes de los relojes... caigan rendidas a sus encantos.
Por cierto, las esferas están disponibles en dos tamaños y algunos modelos llevan pequeños cristales de Swarovski dentro de la esfera.
¿De dónde vienen?
Todo se remonta a un viaje en globo emprendido por su creador Filip Tysander, quien conoció a un caballero inglés que solía usar relojes vintage con correas de nylon. Su nombre: Daniel Wellington. En 2011 comienzan a comercializarse y hoy causan furor.