El pueblo más bonito de Cataluña no está en Barcelona: es esta villa medieval que enamoró a Picasso, según National Geographic

En Tarragona, se ubica Horta de Sant Joan, un paraíso desconocido para las escapadas románticas

pueblo más bonito de Cataluña
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'National Geographic' es una de las entidades que más sabe sobre geografía; culturas del mundo y patrimonio histórico, es normal que nos interese tanto lo que tenga que decir sobre cuáles son los rincones más bonitos de la geografía española. Sobre todo, teniendo tanta variedad entre la que elegir... Teniendo esto en cuenta, se han pronunciado y han dicho que Horta de Sant Joan (en Tarragona) es el pueblo más bonito de toda Cataluña.

Siguiendo los criterios editoriales de los diferentes miembros de Viajes National Geographic, han elaborado una selección de las que consideran que son las localidades más representativas de la belleza rural de nuestro país, incluyendo desde pueblos de montaña hasta joyas costeras.

Aunque es en Cataluña donde nos vamos a detener nosotras. Y es que, según esta entidad, su pueblo más bonito no se encuentra ni en Barcelona ni en la Costa Brava, como uno podría pensar, sino en Tarragona. Se trata de Horta de Sant Joan, con la sierra de Pesells al norte, el Parque Natural dels Ports al sur y los ríos Algars Canaletes y Estrets dándole una orografía accidentada al municipio.

sant joan de horta calafellvalo

Esta población, situada sobre un monte, se caracteriza por un entorno natural excepcional que ofrece una estampa inmejorable desde cualquier punto desde el que se mire. La actividad principal del pueblo es la agricultura de secano y los campos, especialmente de olivos, que se extienden hacia los cuatro puntos cardinales. De hecho, no puedes dejar de visitar el olivo bimilenario Lo Parlot, declarado árbol monumental y ubicado solo a 500 metros de Horta de Sant Joan.

No obstante, es la figura de Picasso el mayor reclamo turístico del núcleo antiguo. El vínculo del pintor con este lugar comenzó en 1898, cuando cayó enfermo de escarlatina y fue a pasar allí el verano para recuperarse. Por supuesto, aprovechó para pintar. Años más tarde, volvió y vivió allí durante cuatro meses en los que afianzó su estilo artístico y siguió creando.

sant joan calafellvalo

Ahora un museo recoge en dicha localidad 200 obras del artista malagueño. Además de esto, en lo que respecta a su conjunto histórico, destaca la iglesia románica-gótica del siglo XII, la casa de la Encomienda y el Ecomuseo dels Ports. De hecho, gracias a todo ello ha obtenido el reconocimiento de Bien Cultural de Interés Nacional.

Foto de portada | Angela Llop

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