En cuestión de pocas semanas hemos pasado del calor más sofocante a frío de cazadoras y paragüas. El otoño está a la vuelta de la esquina y lo estamos empezando a notar. Una clara señal son todas las tormentas y lluvias que la DANA está provocando en España. Y claro, como a veces somos poco previsivas, es probable que el torrencial nos pille con nuestras zapatillas favoritas y terminen empapadas.
Además de que cuando nos sucede esto lo pasamos fatal porque nos deja los pies fríos, otra cosa que nos desespera es que nuestras zapatillas tardan mucho en secarse e incluso en el proceso, pueden terminar cogiendo olor a humedad. Si encima se trata de unas zapatillas nuevas como las que te hemos recomendado en los últimos días de Nike, New Balance o Adidas, entonces nos sienta aún peor.
De cualquier forma, todo problema tiene una solución. También para esto. De hecho, te vamos a contar algunos trucos infalibles para evitar que tu calzado coja mal olor después de mojarse y, lo más importante, que se seque lo más rápido posible. ¡Mira, mira!
Trucos para secar rápido las zapatillas y evitar el olor a humedad
No todo el mundo cuenta con una secadora en casa, además de que en ciertas zapatillas, secarlas en este electrodoméstico, puede ser una idea fatal. Estos trucos caseros te ayudarán:
Papel de periódico
Primero, retira las plantillas de tus zapatillas para que se seque antes. Después, mete en su interior bolas de papel de periódico (asegúrate que el texto de las páginas vaya por dentro y no toque la zapatilla). Después, envuelve las zapatillas con una toalla y colócalas en un lugar que esté bien ventilado. Eso sí, procura que no sea un lugar donde de la luz solar.
Bolsas de té
Coloca una bolsa de té en cada zapatilla y déjalas secar al aire libre. Las bolsas de té convertirán el olor a humedad en un agradable olor a infusión. Además, también ayudará a absorber el agua que quede en tu calzado, ayudando a un secado rápido y eficaz.
Bicarbonato de sodio
Espolvorea un poco de bicarbonato de sodio por el interior de tus zapatillas. Eso sí, hazlo cuando el calzado esté húmedo y no completamente mojado. Después, deja que actúe toda la tarde y tras ello, elimina el exceso de bicarbonato a pequeños golpecitos o toques. Verás como ya ha dejado de tener ese olor tan horrible.
Toallas absorbentes
Este tipo de toallas son capaces de absorver, como su propio nombre indica, toda la humedad de tus zapatos y conseguir que se sequen en cuestión de pocas horas. Simplemente, frota con estas toallas por dentro y por fuera de tus zapatillas. Después, colócalas en un lugar bien ventilado.
Fotos | Unsplash
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