Cuando el año pasado HBO estrenó Years & Years, no imaginaba el éxito que le depararía. Y es que las series que son buenas triunfan de una manera irremediable sin necesidad de tirar de grandes campañas publicitarias. Lo hacen como antaño, aprovechando el boca a boca y creciendo poco a poco hasta convertirse en auténticos éxitos.
Eso le está ocurriendo a la nueva serie del creador de Years & Years, la que se ha convertido ya en una de las mejores series que veremos en 2021. It's a Sin ha venido para arrasar.
Por qué It's a Sin es una serie imprescindible
Al igual que hizo con Queer As Folk en el año 1999, Russel T. Davies se adentra en la ficción LGTBIQ+ de una forma honesta, sincera y tierna. Esta vez ambienta It's a Sin en una década de los 80 que fue despertar y liberación y que nos acompaña no solo en el vestuario (adorable) sino en la música, una auténtica maravilla.
La serie muestra con maestría temas tan vitales como la amistad, el compromiso y la lucha de un colectivo que comenzaba a verse libre en un contexto en el que el SIDA terminaría convertido en un terrible protagonista. El rechazo, la libertad, la impotencia, el miedo, la homofobia, el amor, la rabia… Todo junto en un cocktail maravilloso que nos embriaga desde el primer capítulo.
Este drama es una reflexión sobre el estigma de una enfermedad que llegó a llamarse en su momento el "cáncer gay" y que en esta miniserie se refleja de una forma fascinante. El inicio de una enfermedad mortal que comenzó a azotar a la sociedad y que la serie nos enseña de primera mano. Pero también es esperanza y luz gracias a los protagonistas.
Olly Alexander, Omari Douglas, Callum Scott Howells, Nathaniel Curtis y Lydia West son los protagonistas indiscutibles de esta historia. Ellos dan vida a un grupo de jóvenes, cada uno con su personalidad, que está unido. Sus historias y sus ganas de disfrutar de una vida aunque se les abre paso en un Londres lleno de oportunidades, son el punto de inicio de esta serie de cinco capítulos.
Un reparto maravilloso que nos muestra distintas caras de la moneda y en el que cabe destacar también la interpretación de Keeley Hawes.
El ritmo de la serie, los cambios de registro que en un mismo episodio nos trasladan de la comedia al más puro drama con unos finales de episodio demoledores, el realismo. Todo en un guión tan demoledor como necesario. Una historia fascinante que nos muestra un momento histórico para la humanidad y un sufrimiento que nos cala hondo. Muy hondo.
Y todo junto la convierten en una miniserie redonda que encuentra en sus cinco capítulos su sentido y su verdad. Una oportunidad de disfrutar de una ficción que se ha ganado ya el derecho a situarse en las que serán las mejores series de 2021.
Fotos | It’s a sin (HBO)
