Cuando empieza a brillar el sol de la primavera, la vida en casa se traslada a terrazas, balcones y jardines. Sin embargo, la comodidad de las zonas de exterior de nuestro hogar tiene dos grandes enemigos: las inclemencias del tiempo y las miradas indiscretas. Ya sea porque pegue un sol de justicia, sople algo de viento o porque tenemos a los vecinos demasiado cerca. Para el problema del sol, podemos instalar un toldo vela o comprar una sombrilla. En el caso de las miradas indiscretas, tenemos soluciones como las celosías. Sin embargo, hay un remedio que nos permite solucionar ambos de una.
Los toldos laterales no son tan populares como los horizontales. Y, dentro de esta categoría, menos populares aún son los que son extensibles. Sin embargo, la verdad es que son extremadamente prácticos. Además, en el caso particular del toldo lateral extensible de Lidl, se instala en la pared de forma rápida y sencilla.
Mide un máximo de 3 metros cuando se extiende por completo y, cuando lo necesites, solo tienes que tirar del asa para extenderlo y engancharlo en el soporte instalado previamente. Este, además, cuenta con un práctico mecanismo de autocierre.
Por otro lado, cuando se recoge, el toldo queda completamente pegado a la pared y desaparece casi por completo por lo que apenas tiene impacto visual. Tiene unas medidas de 160x300cm extendido por completo y ha sido tejido en un material de alta calidad repelente a la suciedad, resistente a la intemperie y a los rayos UV. Para favorecer esa resistencia, el armazón es de aluminio duradero con revestimiento en polvo.
Su precio también es otra ventaja y es que este toldo extensible de Lidl cuesta tan solo 59,99 euros. Con todas estas características, ¿cómo no nos va a encantar? Es que no puede ser más económico, práctico y funcional...
Toldo lateral extensible 160 x 300 cm
Foto de portada | Alen Rojnic
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