El divorcio de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina ha llegado como la bajada de temperaturas del otoño. Sin avisar y dejando las cuentas de la segunda tiritando. Ya es un hecho. Tal y como han informado en exclusiva en 'Vanitatis', lo único que faltaría es la firma de ambos, aunque eso sí, "no tienen prisa", según las fuentes en las que se apoya la publicación. Y también tenemos fecha aproximada: "Antes de noviembre ya debería estar todo".
Cabe destacar que fueron las altas exigencias económicas del ex duque de Palma lo que han provocado que a día de hoy sigan siendo marido y mujer. Pero no por mucho tiempo. 'Vanitatis' ha tenido acceso a los puntos acordados en el documento, el cual abarca desde el lugar de la firma hasta quién soltará los dineros. En lo que concierne a la firma del divorcio, el día exacto no se hará público pero sí dónde será. Concretamente, en Barcelona. Ciudad donde se casó la pareja y la razón por la que su matrimonio se sostiene por el Código Civil de Cataluña, en el que predomina la separación de bienes y por la que cada uno se quedaría con lo suyo.
Las propiedades a repartir son poquitas, tirando a una. Entre otras cosas porque cuando explotó el Caso Nóos vendieron la gran mayoría o les fueron embargadas por los juzgados. Solo disponen de un apartamento en Bidart que, según el citado medio, cada uno es dueño de la mitad. Este humilde piso, próximo a la playa del País Vasco francés, se repartirá entre Iñaki y Cristina.
Los hijos y la paga del abuelo
Aunque Juan, Pablo, Miguel e Irene son mayores de edad, los padres tienen que hacerse cargo de sus necesidades económicas hasta que vuelen del nido. Es decir, les queda para rato. La publicación sostiene que, hasta la fecha, era Juan Carlos I el que financiaba los estudios de sus nietos. Igual que hace con los de la infanta Elena.
Ahora, en el divorcio se estipula que, si alguno de los jóvenes royals tuviera un apuro económico, sería Cristina y su familia la que lo resolvería a punta de cheque. O lo que es lo mismo, Iñaki se lavaría la manos. Recordemos que vive con su madre en Vitoria y tan solo recibe una pensión de 463 euros mensuales como subsidio de preso en libertad.
Cristina paga la cuenta
Desde que la palabra divorcio asomara la cabecita por los titulares made in Spain, son varias las cifras (y muchos los ceros) que se han barajado sobre lo que le tocaría aflojar a la infanta. La más extrema la desveló el periodista Juan Luis Galincho en 'Cuatro al día', quien afirmó que Urdangarin recibiría una indemnización de dos millones de euros, ya habiendo cobrado la primera mitad, y una pensión mensual de 25.000.
"No dejes de soñar", Iñaki, como diría el gran Manuel Carrasco. Según comunican en 'Informalia', la pensión finalmente será de 5.000 euros, y aquí iría incluida una clausula de confidencialidad por la que NO podrá decir nada que afecte ni a Cristina ni al resto de la familia real.
Foto | Gtres
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