La vida en la ciudad es estresante. Todo el día arriba y abajo, el tráfico, las obras. En fin, no hay nada que nos apetezca más durante el fin de semana que escapar del bullicio. Si vives en Madrid o Barcelona (por poner algunos ejemplos) lo tienes fácil: tan solo tienes que coger el coche o el tren y escapar a un pueblo que exude paz y tranquilidad.
Si vives en la capital y no te da pereza coger el coche para un viaje de una hora y media, puedes visitar Maderuelo (en Segovia). Se trata de un pueblo medieval con muy pocos habitantes (125 para ser exactos, según los datos del INE), cuya belleza está declarada Bien de Interés Cultural, dentro de la categoría de Conjunto Histórico. Asimismo, forma parte de la red de los Pueblos más bonitos de España. Ahí es nada. Quizás no te sonara de nada hasta ahora. Tranquila que te lo contamos.
Qué ver en Maderuelo
En este precioso pueblo medieval destaca la gran muralla que lo protege, las calles de piedra y los puentes (sí, hay dos) sobre el pantano. Aunque antes había también un castillo. En definitiva, un paisaje muy diferente al de la ciudad del siglo XXI.
Entre sus monumentos, encontramos la Ermita de la Vera Cruz, donde podremos conocer uno de los conjuntos pictóricos románicos más importantes de la Península Ibérica. Además, se el pueblo conserva parte de la antigua muralla, como el Arco de la Villa.
Como ya hemos comentado, en Maderuelo no hay un puente, sino dos. Concretamente, el Puente Viejo (que solo podemos ver cuando baja el agua del pantano) y el Puente Nuevo, construido en paralelo. Pero, para ver las vistas en todo su esplendor, acércate al Mirador del embalse de Linares del Arroyo.
En la entrada principal de la villa brilla la Puerta de la villa, una entrada que protege el acceso oeste. En el centro del pueblo descubrimos también la Plaza de San Miguel, donde se encuentra la Ermita de San Miguel. En su interior, podemos observar una talla policromada de dicho santo que data del siglo XVI. La Plaza del Baile, por su lado, está dedicada a Pérez de Seoane, benefactor de Maderuelo.
Aunque, como suele ocurrir con la mayoría de los pueblos retro de este tipo, lo mejor es perderse por sus calles e ir descubriendo sus tesoros sin mapa. Eso sí, un apunte extra: las fiestas patronales se celebran el último domingo de septiembre, en honor de nuestra Señora de Castroboda, por si prefieres esperar a visitar el pueblo en época de fiestas.
Comer y dormir en Maderuelo
Aunque Maderuelo es un pueblo pequeño, hay buenos restaurantes y bares donde llenar el estómago. La primera parada puede ser en Mirador De Los Templarios, un restaurante con vistas impresionantes que está situado en la calle San Miguel. Apenas a unos metros, también podemos comer en el Restaurante Posada del Medievo (C. San Miguel, 4).
Si andas buscando algo más informal o solo quieres tomar algo rápido, puedes acudir al Bar Cafetería Veracruz. Eso sí, al ser un pueblo pequeño y tener una oferta de restauración tan limitada, recomendamos que si vas a ir en fin de semana, reserves con tiempo.
Dónde dormir en Maderuelo
Al igual que ocurre con las opciones gastronómicas, al ser un pueblo tan pequeño, no hay muchos hoteles. No obstante, los que hay merecen la pena para una escapada rural. Por ejemplo, el Hotel Rural El secreto del Castillo (C. Castillo, 2) tiene mucho encanto. Y lo mismo pasa con el Eco Hotel Boutique & Spa Capítulo Trece - Adults Only (C. San Miguel, 18), un lugar idóneo para una noche romántica.
Fotos | iStock
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