En este precioso pueblo medieval, donde vivió el Cid, se esconde uno de los castillos defensivos más imponentes de España

Ubicada en territorio fronterizo, Berlanga de Duero expande su territorio al suroeste de la provincia de Soria. Se trata de un lugar de esplendoroso pasado y escenario de múltiples batallas y reconquistas que, con sus murallas, calles porticadas y, sobre todo, gracias a su impresionante castillo, ostenta el título de Conjunto Histórico Artístico. Aunque también puede presumir de que El Cid fue su primer alcalde.

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Este es el castillo más impresionante de toda España. Tanto por lo que se ve como por lo que oculta

A solo 40 minutos del suroeste de la capital de Soria y 20 minutos de El Burgo de Osma se encuentra Berlanga de Duero, una localidad que recibe su nombre del río Duero y sus afluentes, que por aquí pasan. Se trata de un viaje de vuelta al medievo gracias a la impronta arquitectónica que le dio ser un enclave de gran importancia durante la Reconquista.

No solo es un lugar repleto de atalayas islámicas, desde las que los árabes vigilaban el territorio para defenderse de posibles ataques cristianos, también abundan los ejemplos del románico. Tal vez, de entre todos ellos, destaca especialmente la ermita de San Baudelio, de estilo prerrománico con influencia mozárabe.

Junta de Castilla y León

Las paredes de este templo estuvieron totalmente cubiertas por pinturas al temple que reflejaban una sociedad mestiza. Sin embargo, muchos de esos lienzos cuelgan ahora de prestigiosos museos de importancia internacional como El Prado en Madrid o el Metropolitan en Nueva York.

Lo que hace tan especial a este pueblo es que todavía mantiene la estructura y arquitectura propias de una población medieval con su palacio ducal, casas señoriales, convento, la puerta de Aguilera, hospital extramuros, plaza Mayor (de arquitectura castellana) y colegiata de estilo renacentista.

Luis Georg Müller

La joya de la corona, no obstante, la encontramos en lo alto de un cerro. Se trata del Castillo de Berlanga de Duero, símbolo más representativo de la villa. Este castillo formaban parte del sistema defensivo del Califato en la frontera de la Marca Media. Estaba protegida al norte por la hoz que forma el río Escalote y a sus pies se extiende la que fue una de las fortalezas más imponentes de toda la provincia.