Si en Navidad engordamos no es solo porque nos ponemos las botas en Nochebuena, Navidad, Nochevieja y Año Nuevo, sino porque el resto de días de fiestas navideñas no paramos de comer y comer: cenas de empresa, reuniones con los amigos, comidas familiares porque "para unos días que viene tu hermano a visitarnos", y comidas de aprovechamiento de sobras ("hija, vente a comer, que de Navidad quedó un montón de comida y no la vamos a tirar"). En fin, que mi ropa ya no da más de sí y cuando pienso en comer con la familia y tirarme después en el sofá solo quiero looks cómodos y confortables como éstos.
Necesitamos looks con jerséis gorditos, minifaldas y pantalones que no aprieten, camisetas de rayas.
Como estamos cansadas de llevar tacones altos, mejor optamos por botines planos, de poco tacón, o de tacón cuadrado para que no se nos agoten los pies.
Y como ya no podemos con las lentejuelas, preferimos los cálidos cárdigans de lana con bufanda a juego.
Fotos | Simple et chic, Sincerely Jules, Viva Luxury
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