Aplaudido por unas y aborrecido por otras, tener relaciones sexuales durante la regla continúa siendo un debate con cierta polémica aunque estemos en el siglo XXI. Si recurrimos a datos científicos, encontramos que tan solo el 15% de las mujeres menstruantes quiere tener encuentros en la cama durante el periodo, mientras que el 21% evita toda actividad sexual en estas fechas del mes. Así lo asegura un estudio de la plataforma Clue en colaboración con Kinsey Institute. Lo sorprendente es que, según las expertas consultadas para este artículo, la gran mayoría de las mujeres afirman sentirse más excitadas para tener sexo durante días concretos de su periodo. Por tanto, ¿qué nos impide aprovecharlo?
Un tema tabú
La menstruación es uno de los tabúes más antiguos y continúa generándonos cierta vergüenza. "Cómo percibimos la regla es algo claramente cultural. No deja de ser una construcción social, aun estando basada en algo biológico. Aún es un gran tabú para nosotras", aclara Noemí Villaverde, autora de 'Una antropóloga en la luna'.
Si tiramos de historia y nos remontamos a las creencias filosóficas y religiosas sobre la menstruación, en la Grecia clásica, Hipócrates (460-370 a.C), conocido como padre la medicina moderna, se refería a la menstruación dentro de su obra ‘Enfermedades de las mujeres’ (el título ya era toda una declaración de intenciones). Incluso el Antiguo Testamento habla de la impureza de la mujer con la regla: "Cuando la mujer tuviere flujo de sangre, y su flujo fuere en su cuerpo, siete días estará apartada; y cualquiera que la tocare será inmundo hasta la noche". De hecho, hasta se cree que la palabra tabú puede derivar de tupua, que significa menstruación en polinesio.
“La menstruación se le compara en el Levítico de la Biblia con la gonorrea para que te hagas una idea”, nos cuenta Miriam Gómez, sexóloga a cargo de Sexología Femenina. “Somos capaces de arruinar cosechas, contaminar aguas, estropeamos la comida y todo ello sin hacer nada, solo por menstruar. La realidad es que todas estas creencias tuvieron su origen en una época donde eran bastante ignorantes sobre la sexualidad femenina. Aunque algunos se empeñan en seguir siendo ignorantes”, añade la experta.
“Siempre se ha visto como un aspecto negativo, impuro (hasta contaminante), un tema sucio y reservado, un tabú sobre el que aprendimos (porque así nos enseñaron) a sentirnos incómodas desde pequeñas”, nos asegura la sexóloga Carlota Ruiz. “La falsa creencia de pensar que estamos sucias nos hace renunciar al placer”, explica.
Y es que, ¿cuántas veces hemos escuchado eso de “debe tener un día de esos” o “será que le va a bajar la regla”? Eso sin olvidar que, al menos en mi propia experiencia, se nos ha enseñado a no hablar del tema... sobre todo si hay hombres cerca.
Los datos de la citada encuesta no son de extrañar si reparamos en la poca visibilidad que ha tenido el tema sobre “la regla” durante los años. Y es que no fue hasta 2017 (sí, no han pasado ni tres años) cuando un anuncio británico se tiró a la piscina para representar la sangre de color rojo. ¿Parece obvio? Pues hasta entonces, todas sus referencias en televisión y en papel se habían mostrado con colores azules.
“Por suerte poco a poco estamos logrando romper los tabúes sobre el sexo y la menstruación. Pero aún nos queda mucho por hacer. Este tipo de campañas a las que nos hemos acostumbrado son todo menos realistas, y no nos ayudan a sentirnos cómodas con un tema que es completamente natural y humano. ¿Por qué avergonzarse?”, se pregunta Carlota Ruiz.
Si los hombres menstruaran
Planteémoslo de otra manera. ¿Alguna vez te has percatado de qué pasaría si los hombres menstruaran? ¿Qué ocurriría, por ejemplo, si de pronto, por arte de magia, los hombres pudieran tener la menstruación y las mujeres no? Tal y como advierte Gloria Steinem en su ensayo 'Si los hombres menstruaran', “sería un acontecimiento de hombres totalmente envidiable y del que se podría presumir”.
"Los hombres hablarían del tiempo de duración y de la cantidad de su periodo. Los muchachos celebrarían el inicio del periodo -ansiada prueba de su masculinidad- con rituales religiosos y fiestas solo para hombres. Y hasta el Congreso subvencionaría el Instituto Nacional de la Dismenorrea para combatir las molestias del mes", expone.
Por tanto, y viéndolo con otra perspectiva, “los hombres convencerían a las mujeres de que hacer el amor es más placentero justamente en estos días".
Una vez más, comprobamos que el “pudor” o “miedo” que sienten muchas mujeres sobre este tema se debe a un problema cultural que debemos ir cambiando y construyendo de nuevo entre todos día a día.
“Al final es una cuestión de autoestima y de creencias inculcadas por nuestro entorno”, razona la psicóloga clínica Elena García Vega cuando le preguntamos por la base del problema. “A las mujeres se les inculca que deben ser perfectas y correctas; y la menstruación sigue siendo algo sucio y rechazado por el hombre, al cual, en general, tratamos de agradar y complacer. Las mujeres con autoestima alta y mentalmente liberadas tenderán más al placer, sin darle importancia a este tipo de detalles”, defiende García Vega.
Beneficios del sexo durante la regla
Entender tu ciclo menstrual y cómo te afecta puede ser determinante, incluso para tu vida sexual. "Si solo atendemos a los aspectos hormonales fisiológicos sí que es cierto que hay una serie de características que pueden facilitar un mayor deseo sexual o una mayor excitación (que no es lo mismo) en la fase de menstruación", explica María Jiménez, psicóloga clínica experta en sexología. "Con deseo sexual nos referimos a impulso, ganas, apetencia; mientras que excitación es lo que tú sientes. ¿Qué ocurre? Que las hormonas sexuales (los estrógenos sobre todo y la progesterona) varían mucho a lo largo del ciclo menstrual. Sí que es cierto que justo antes y justo después hay un mayor aumento de estrógenos y sí que puede haber un aumento del deseo sexual. Además, lógicamente, la excitación, el orgasmo, la liberación de endorfinas (que son las encargadas del placer, la recompensa)... aumentan el placer y disminuyen el dolor menstrual.
La experta nos explica además que durante el periodo toda la zona vaginal está muchísimo más lubricada, algo que, lógicamente, facilitará esas relaciones sexuales.
Otro punto positivo: Tener una mayor vasocongestión de la zona facilitaría también el tema de las relaciones durante el periodo. "Hay menos tensión, aumento de clítoris, de los labios...", asegura.
Todo esto a nivel fisiológico. Pero luego nos encontramos con muchas variantes más: "El estado anímico, la educación sexual, cómo esté con mi pareja, cómo me relaciono yo con el sexo, el momento en que me encuentre, la satisfacción mía propia en el tema de las relaciones sexuales... Me atrevería a decir que estas variables son incluso más importantes que la fisiológica que por supuesto influye, pero no sería la única", finaliza.
“Es curioso que el cambio hormonal hace que muchas mujeres tenga una gran excitación y ganas de mantener sexo en los primeros días de la regla”, expone Miriam Gómez. “Lo ideal -añade- es que si tienen ocasión y no existe un impedimento de otra índole aprovecharán ese deseo y lo saciaran a su antojo”.
Normalizando la menstruación
Por suerte, cada vez son más las campañas de visibilización (muchas de ellas a través del arte) y las mujeres que se atreven a compartir sus experiencias abiertamente. “La llegada de la copa menstrual está reconciliando a muchas mujeres con su sangre menstrual y creo que ese es el primer paso para normalizar el sexo durante el periodo. Porque lo importante es que nosotras nos reconciliemos con nuestro propio período y el resto vendrá poco a poco”, nos garantiza la responsable de Sexología Femenina.
"Existe una gran resistencia al cambio, sobre todo en temas de sexualidad y sobre todo si implica que el cambio es sobre lo que pensamos de las mujeres. También nos pasa a nosotras", añade. "Nos queda mucho trabajo por hacer y por normalizar, pero lo que más me impresiona personalmente es que aún siga dando "asco" la sangre menstrual pero que la mayoría no se inmute al ver sangre de guerra, bombas u otro tipo de agresiones violentas", explica Gómez Galocha.
El miedo a manchar también es una realidad y está directamente relacionado. "Si como mujeres no hemos asimilado y hecho las paces con nuestra regla tendremos miedo a que pase", añade la experta. Y hace hincapié en que esto sólo puede superarse si una misma "acepta y normaliza la menstruación". "Es incómodo manchar, pero desde esa perspectiva ya no es frustrante... Aunque para eso hay que valorarse mucho como mujer", sentencia.
En definitiva, vemos que eliminando todo juicio tu vida sexual solo puede ir a mejor. Y si a pesar de todo no deseas tener contacto sexual durante estos días, recuerda que existen numerosas alternativas como el sexo oral o los juguetes sexuales.
“Solo trabajando en ti misma puedes llegar a liberarte de la culpa que genera hacer algo supuestamente incorrecto para la sociedad, que probablemente ni te hayas planteado si es también incorrecto para ti. Si mejora tu autoconcepto y aceptas que tienes derecho a disfrutar tu mente ignorará esos tabúes y clichés dejando espacio a la experiencia”, manifiesta García Vega.
Y concluye añadiendo que “cuando aprendemos a vivir en el momento presente y a ser conscientes de cada acción que estamos llevando a cabo, descubrimos y sentimos sensaciones nuevas que al no verse ensombrecidas por nuestras cogniciones, nos hacen disfrutar muchísimo más”.
Fotos | 'Period. End of Sentence' (2018) | Pexels | 'Menstrual Man' (2013) | 'La luna en ti' (2010)
