Los 16 dioses egipcios más importantes y su historia

Antes que los culebrones turcos, las novelas de la tarde, los drama coreanos y que 'Keeping Up with the Kardashians' fue la mitología egipcia. Un intrincado de personajes y e historias llenas de truculentos salseos que conformaban la estructura de creencias de la cultura egipcia desde, al menos, el año 4000 AEC. Además, estas creencias influyeron en otras culturas por los que es muy interesante conocerlas. Básicamente, los egipcios entendían que la existencia humana era solo un pequeño segmento de un viaje eterno orquestado por fuerzas sobrenaturales que encarnaban las muchas deidades que formaban el panteón egipcio. Estas son algunas de ellas.

Anuket

Era una diosa del agua, especialmente de las cataratas de Asuán, región donde era especialmente adorada. Su nombre significa: "la que abraza". Se representaba como una mujer con corona cilíndrica de plumas que portaba un cetro de papiro y el anj. En el período ptolemaico, también se la asoció con la lujuria y la sexualidad por extensión de su papel fertilizador y con la concha cauri cuya forma recuerda a la de una vagina.

Ammit

Representada como un ser con cabeza de cocodrilo; parte delantera de león y trasera de hipopótamo, Ammit era considerada la "devoradora de los muertos". Y es que, literalmente, esta diosa devoraba el corazón de una persona fallecida cuando no era considerada "Justa de voz" (pura) en el Juicio de Osiris. Celebrado en el inframundo, los antiguos egipcios creían que en esta ceremonia se comparaba el peso del corazón del difunto (símbolo de los actos pasados terrenales, la conciencia y moralidad) contra una pluma que representaba la verdad, justicia y armonía universal.

De este modo, para que un difunto pudiera ser considerado "Justo de voz", el corazón y la pluma debían ser igual de ligeros. En caso de que el corazón pesara más que la pluma, era considerado impuro y Ammyt lo devoraba. Esto significaba que a la persona juzgada no se le concedía entrar en el paraíso, perdiendo su condición de inmortal y pereciendo así definitivamente.

Amón-Ra

Para los egipcios, su deidad creadora y más importante era Amón, "El Oculto" en alusión al carácter invisible del aire. Incluso se fusionó con el dios del Sol para subir de categoría y convertirse en Amón-Ra. También se le asociaba al carnero, que era un símbolo de fertilidad. Su culto fue el más poderoso y popular de Egipto durante siglos y su culto rozaba el monoteísmo. Los demás dioses se consideraban incluso rasgos de Amón en esa época. Se lo suele representar como un hombre con barba que lleva un tocado con doble penacho o, después del Reino Nuevo, como un hombre con cabeza de carnero o simplemente un carnero, que simboliza la fertilidad.

Anubis

Se trata del guardián de las tumbas asociado con la muerte y la vida después de esta en la religión del Antiguo Egipto, además de señor de las necrópolis y patrón de los embalsamadores. Se representaba como un chacal, un perro salvaje o como un hombre con cabeza de chacal. Anubis era el protector y guía de los difuntos, por lo que es uno de los dioses más antiguos de esta cultura y está ampliamente representado en el arte funerario. Lo hacían, además, en negro, el color que representaba la regeneración, la conservación eterna y la fertilidad.

Anubis fue el antiguo dios del inframundo hasta que Osiris subió al poder en el "mundo de los muertos" y Anubis tomó un papel secundario, encargándose de embalsamar los cuerpos de los difuntos, guiarlos a la necrópolis y protegerlos con su vida. También era el encargado de vigilar, junto a Horus, la balanza en la que se pesaban los corazones de los difuntos durante el Juicio de Osiris.

Bastet

Adorada desde la segunda Dinastía, representa la protección, el amor y la armonía. Protectora de los hogares y templos, también fue la diosa de la guerra en el Bajo Egipto, antes de la unificación de las culturas del antiguo Egipto. Se representaba con la forma de un gato doméstico (de hecho, los egipcios consideraban a los gatos como manifestaciones de esta diosa). También se representaba como una mujer con orejas, cola, dientes y ojos de gato, que siempre lleva un anj (cruz de la vida egipcia) o, en su defecto, un sistro (instrumento musical) porque le gustaba especialmente que los humanos bailaran y tocaran música en su honor.

Su culto se remonta a los primeros tiempos de la civilización egipcia y es la personificación de los cálidos rayos del Sol. Encarnaba los aspectos pacíficos de otras diosas peligrosas. Estaba asociada a la luna y protegía los nacimientos y a las embarazadas de las enfermedades y los malos espíritus. No obstante, cuando se enfada, se transforma en una leona, pudiendo llegar a ser violenta. Y es que Bastet era una diosa impredecible que podía mostrarse tierna o feroz en cualquier momento.

Hathor

Es una de las principales diosas de la religión del Antiguo Egipto y desempeñaba una gran variedad de papeles. Como deidad del cielo, era la madre o consorte del dios celeste Horus y del dios solar Ra (ambos relacionados con la realeza), por lo que Hathor era la madre simbólica de sus representantes terrenales: los faraones. Fue una de las muchas diosas que asumió el papel del Ojo de Ra, la contraparte femenina de Ra, y en esta forma tenía un carácter vengativo que lo protegía de sus enemigos.

Su lado benefactor, por otro lado, representaba la música, la danza, la alegría, el amor, la sexualidad y el cuidado materno, actuando como consorte de varias deidades masculinas y madre de sus hijos. Estos dos aspectos de la diosa ejemplificaban la concepción egipcia de la feminidad. Con frecuencia era representada como una vaca, símbolo de su carácter maternal y celestial, aunque su forma más común era la de una mujer con un tocado de cuernos de vaca y un disco solar.

Horus

Una de las deidades más importantes del antiguo Egipto, que desempeñaba numerosas funciones aunque, principalmente, como dios de la realeza y del cielo, así como de la guerra y de la caza.​ A veces se le consideraba como el iniciador de la civilización egipcia. A menudo se le representaba como un halcón coronado con el pschent (probablemente un halcón lanario o un halcón peregrino) o como un hombre hieracocéfalo (es decir, con cabeza de halcón).

La relación familiar más comúnmente encontrada describe a Horus como hijo de la diosa Isis y el dios de la resurrección Osiris. Además, desempeña un papel clave en el mito de Osiris como heredero de Osiris y rival de Seth, el asesino y hermano de Osiris. Durante el juicio de Osiris, según el Libros de los Muertos, es el mediador entre el finado y Osiris.

Isis

Una de las principales diosas de la religión del Antiguo Egipto y es uno de los principales personajes del mito de Osiris, en el que resucita a su esposo asesinado, el divino rey Osiris, y engendra y protege a su heredero, Horus. Se creía que ayudaba a los muertos a entrar en la otra vida como había ayudado a Osiris y se la consideraba la madre divina del farón, a quien a su vez se le identificaba con el dios Horus.

Su ayuda materna fue invocada en encantamientos de curación para beneficiar a la gente común. Por lo general, el arte la retrataba como una mujer que lucía en su cabeza un jeroglífico en forma de trono. Después, Isis llegó a ser retratada con el tocado de Hathor: un disco solar entre los cuernos de una vaca. Su culto terminó con el ascenso del cristianismo y puede haber influido en sus creencias y prácticas, como la veneración a María.

Maat

Maat aparece representada como una mujer, de pie o sentada, llevando sobre la cabeza una pluma de avestruz de forma vertical y portando un cetro uas y una Anj. Aunque tras el reinado de Ajenatón, también fue representada como mujer alada. Era hija del dios Sol egipcio Ra y esposa de Thoth, el dios de la Sabiduría que inventó la escritura. Mientras que, para los egipcios, era la fuerza benefactora de la que se nutrían los dioses a quienes adoraban. Por ello los sacerdotes hacían diariamente ofrendas y rituales para el mantenimiento del orden armonioso y justo del mundo.

Maat es un concepto basado en el intento de la humanidad de vivir en un estado armónico natural. Está asociado con el juicio del difunto cuando se mide en una balanza si una persona ha hecho lo correcto en su vida. Por lo tanto, hacer Maat era actuar de una manera irreprochable o inculpable.​ Es fundamentalmente un concepto abstracto de justicia universal, de equilibrio y armonía cósmicos que imperan en el mundo desde su origen y es necesario conservar.

Neftis

Neftis, o “Señora de la Casa”, era la diosa del aire (el cielo era la “cabeza” del mundo) y la cabeza de familia. Era hija de Geb (Tierra) y Nut (cielo) y hermana de Isis. Además de esposa de Seth y madre de Anubis, aunque en algunos mitos también era estéril. Por lo tanto, se la asociaba con los buitres, un ave que los egipcios creían que no podía tener hijos, y con el luto.

Neftis ayudó a Isis a devolver a la vida a Osiris después de que Seth lo matara, por lo que a menudo es representada en tumbas y sobre ataúdes como protectora de los muertos. Neftis e Isis tienen una apariencia muy similar y solo se pueden diferenciar por sus tocados. Neftis lleva una canasta en la cabeza aunque, a veces, también se la representa como un halcón o una mujer de luto.

Osiris

Según la mitología egipcia fue el inventor de la agricultura y su reinado fue beneficioso y civilizador. Murió ahogado en el Nilo, asesinado en una conspiración organizada por Seth, su hermano menor. A pesar del desmembramiento de su cuerpo, fue devuelto a la vida por el poder mágico de su hermana Neftis y su esposa Isis. Su martirio le valió para conquistar el mundo del más allá, donde se convirtió en juez soberano y supremo de las leyes del Maat. Su representación es antropomórfica.

Ra

Es el dios del sol y una de las deidades más antiguas del panteón egipcio, que luego se fusionó con otras como Horus y se convirtió en Ra-Horajty (el sol de la mañana), Amón (como sol del mediodía) y Atum (el sol de la tarde). Como deidad solar, Ra encarnaba el poder del sol, pero también se creía que era el propio sol, imaginado como el gran dios que cabalgaba en su barcaza por los cielos a lo largo del día y descendía al inframundo al atardecer.

Mientras se abría paso por la oscuridad bajo la tierra, era atacado cada noche por la serpiente gigante Apofis, que intentaba impedir que el sol saliera y, de este modo, destruir toda la vida en la tierra. Ra está asociado con este poder transformador, que lo vinculaba con el sol que permitía el crecimiento. Casi siempre se lo representa como el macho con cabeza de halcón y el disco solar sobre su cabeza.

Sejmet

Su nombre significa: “La que es poderosa” o “Aquella que ama a Maat”. Era la diosa del cálido sol del desierto, la peste, el caos, la guerra y la curación. Fue creada del fuego del ojo del dios sol Ra cuando miró la Tierra y como un arma para destruir a los humanos por su desobediencia y por no vivir de acuerdo con los principios de Maat. A veces se la veía como la hija de Geb (la tierra) y Nut (el cielo).

Era representada con el cuerpo de una mujer con una cabeza de león y con un disco solar. Era vista como la protectora de los faraones y los guiaba en la guerra. Cuando estaba en un estado más tranquilo, tomaba la forma de la diosa gato del hogar, Bastet. Sejmet era una diosa aterradora, pero, sin embargo, para sus seguidores podía evitar la peste y curar enfermedades. De hecho, era la patrona de médicos y curanderos.

Seth

Era el dios egipcio de la guerra, el caos y las tormentas. Además de hermano de Osiris, Isis y Horus el Mayor, tío de Horus el Menor y hermano-esposo de Neftis. Su otra consorte era Tawaret, una deidad con cabeza de hipopótamo que presidía sobre la fertilidad y el parto. Es una de las cinco primeras deidades nacidas de la unión de Geb (la tierra) y Nut (el cielo) tras la creación del mundo. Su nombre se suele traducir como "el que instiga la confusión" y "destructor", y estaba asociado al desorden, las tierras extranjeras y sus gentes, y el color rojo. En ocasiones se lo representa como una bestia de pelo rojo con una cola partida y pezuñas, o una bestia roja parecida a un perro.

Thot

Es el dios de la sabiduría, la escritura jeroglífica, la ciencia, la magia, las artes, el juicio, los muertos y, en ocasiones, se le vincula con la luna. Por otro lado, a esta deidad también se la reconoce por su papel como "consejero" o intermediador entre dioses, o entre estos y los hombres. Es representado como un hombre con cabeza de ibis o de babuino, sus animales sagrados. En ocasiones porta un pincel y una tablilla de escritura, con los que anota los pensamientos, palabras y actos de los seres humanos para pesarlos en su balanza. Suele llevar también el Anj en una de sus manos. En ocasiones se le muestra, además, con una lúnula sobre su cabeza que sostiene al disco solar.

Geb

Geb era el dios de la tierra para los antiguos egipcios. De este modo, se creía que tenía el poder sobre todo lo que había en ella. Él fue el creador de los minerales, las plantas y los terremotos, que se producían cada vez que intentaba alcanzar a su esposa Nut, la diosa del cielo o de la bóveda celeste. Su leyenda es una de las más famosas de la antigua mitología egipcia.

En ella, Geb y su esposa estaban juntos en el principio de los tiempos, siendo la fértil unión de la tierra y el cielo. Pero el dios Ra les tenía envidia y colocó a Shu (el dios del aire) entre ellos para que nunca más pudieran estar juntos. Apiadándose de ellos, Toth (dios del conocimiento) retó a Ra y, al ganar, concedió a la pareja cinco días para estar juntos. De esos cinco días salieron sus hijos: Osiris, Isis, Seth y Neftis.

Foto de portada | Color Crescent

En Trendencias | Los 60 poemas de amor más bonitos para dedicar a tu pareja

En Trendencias | Cruïlla 2025: cartel definitivo, todos los tipos de entradas disponibles y qué se sabe de los horarios