¿Cuánto tiempo le queda a Amancio Ortega para ser el hombre más rico del mundo?

Empezó vendiendo albornoces y batas de señora en su tierra de adopción, Galicia, a la que ha puesto en el mapa mundial gracias a un imperio textil liderado por su marca insignia, Zara. Puede que pocos lo sepan, pero Amancio Ortega nació en León y llegó a tierras gallegas siendo un niño debido a la profesión de su padre, que era ferroviario.

Con 14 años se introdujo en el sector textil por primera vez, pues a esa edad comenzó a trabajar en varias tiendas de ropa, donde cogió el gusto por la moda y pronto se lanzó hacia su aventura empresarial, la que le ha llevado a la cima desde la que reina en el imperio textil desde su Galicia querida. A través del ingente patrimonio que ha amasado durante todos este tiempo, el cual empezó hace 40 años con la primera tienda Zara en La Coruña pero se ha diversificado a otros ámbitos, como el inmobiliario, ha levantado un imperio que interesa hasta a la mismísima Anna Wintour.

Ortega acumula una fortuna valorada en 69.000 millones de dólares –unos 61.600 millones de euros-, según la lista Bloomberg de este mes de septiembre. De este modo, el español ocupa el 2º puesto del ranking, que encabeza Bill Gates -78.600 millones de dólares-, y que deja tercero al Oráculo de Omaha, Warren Buffet, -60.900 millones de dólares. Esto significa que ha ido engordando más sus arcas en este año, porque en marzo la revista Forbes, que también tiene otra prestigiosa clasificación, lo situaba en la cuarta plaza con 64.500 millones de dólares.

A tenor de esta progresión, es probable que en poco tiempo veamos al español aupado en la primera plaza del ranking de los más adinerados del planeta, ya que es dueño de uno de los grupos textiles más importantes y con más proyección y, además, sabe mover su patrimonio a través de otras operaciones de inversión que le reportan cuantiosas ganancias y le permiten sacar aún más rédito a lo que recibe de la enseña de moda.

Amancio Ortega, el "mago" de la bolsa

Además, respalda todo este negocio en una trayectoria bursátil impecable. En 2001 Inditex tuvo una salida a bolsa nada despreciable, rondando los 15 euros por acción, que hoy en día se han revalorizado hasta los 29,90 euros cada una. Además, está en su papel social, pues Amancio Ortega repartió un 2% de las acciones del grupo textil entre amigos, familiares y empleados cercanos a un irrisorio precio de 2,93 euros.

Amancio Ortega ostenta casi el 60% de Inditex, la enseña que agrupa a todas sus marcas, entre las que también destacan Bershka, Oysho, Uterqüe, Pull & Bear o Massimo Dutti. Es decir, no solo tiene a Zara, la joya de la corona, sino que tiene un buen ramillete de firmas de moda joven que se alternan las unas a las otras en la mayoría de los armarios del mundo.

De este modo, ese 60% le garantiza un crecimiento considerable de su cartera, pues esas marcas no paran de ver crecer sus ventas, a la vez que se expanden por todo el globo. Así, no extraña que en el primer semestre del año Inditex haya disparado su beneficio un 26% -1.166 millones de euros- y haya vuelto a batir récord de ventas con 9.421 millones, un 16,5% más que en el primer semestre de 2014.

Y todo apunta a que el final de año será meteórico, pues las cifras adelantadas de su tercer trimestre fiscal muestran un crecimiento de las ventas del 16% frente al mismo periodo del año anterior.

Zara tira del carro

Los números presentados hace unas semanas dejaron claro que Zara es la clave de este éxito comercial. No obstante, es su hermana ‘Home’, dedicada al menaje del hogar, la que más peso tiene en la facturación del grupo –un 22%-, mientras que la enseña dedicada a la ropa significa el 18%.

Europa sigue siendo la región en la que más vende Inditex, pero es probable que en poco tiempo se quede relegada por América y, sobre todo, por Asia, que vienen pisando fuerte, ya que son los puntos donde más tiendas quiere abrir la cadena. De hecho, Asia ha pasado en poco tiempo a suponer un cuarto de la facturación mundial.

Actualmente, el grupo opera 6.777 tiendas en 88 mercados tras realizar 94 aperturas en 35 mercados en el primer semestre de 2015. El pasado año, a estas alturas Inditex ya había abierto 120 locales, lo que evidencia el descenso de las inversiones de un año a otro del 3,3%. Es decir, se está rebajando el pistón a la vista de que no es necesario abrir tantas tiendas, porque el fenómeno sigue creciendo.

Pontegadea, el brazo inversor

Pero no solo de ropa se nutren las arcas de Ortega, también de ladrillo. El multimillonario rentabiliza su patrimonio a través de su holding inversor, Pontegadea, una sociedad con un patrimonio de 7.132 millones de euros según los últimos datos disponibles, que son del cierre de 2013.

A través de este holding, Amancio Ortega invierte los dividendos que obtiene de Inditex, sobre todo, en edificios y oficinas. De hecho, tiene un patrimonio de más de 4.000 millones de euros en inmobiliario.

De este modo, el empresario dispone siempre de liquidez y sigue engordando su imperio, pues es dueño de algunos de los edificios más importantes de España –Torre Picasso (Madrid), el número 1 del Paseo de Gracia (Barcelona)- y de las principales capitales, como Londres o Nueva York.

Las amenazas del imperio Inditex

Como es lógico, no hay éxito sin superar adversidades y, una vez que se consigue, no se puede bajar la guardia. Esto es lo que le ocurre al grupo de Amancio Ortega ahora mismo. Aunque tiene una posición más que consolidada, tiene un rival que está empeñado en hacerse con su trono. Se trata de la sueca H&M.

De hecho, en España ya crece más que Inditex. Hace unos días presentó sus cuentas de los primeros nueve meses de su ejercicio fiscal, las cuales revelaron que en ese tiempo las ventas habían crecido un 12% en nuestro país. Por su parte, las del gigante gallego en los seis primeros meses lo hicieron un 6%.

La estrategia de los suecos para desbancar a Inditex pasa por abrir tres nuevas tiendas al día en todo el mundo. Es decir, es totalmente opuesta a la de Inditex, que está apostando más por consolidarse.

A parte del rival directo, Inditex tiene otra amenaza en ciernes, la crisis económica de China, que ha atemorizado a los mercados en el último mes y que hace temer por un regreso de la recesión a todo el mundo. Evidentemente, si esto ocurriera, el grupo se vería afectado, como ya ocurrió hace unos años. Pero por el momento, las alarmas han bajado su intensidad y los expertos esperan que haya sido una tormenta pasajera.

Así, vemos que, aunque hay obstáculos de por medio, es muy posible que el visionario emprendedor gallego de adopción llegue a tener la mayor fortuna del mundo entero en poco tiempo.

Foto de portada | Cordon Press
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