Ver la vida pasar y comprobar cómo, inevitablemente, el paso del tiempo afecta a nuestro cuerpo no siempre resulta fácil de aceptar. Sin embargo, hay quien parece haber hecho un pacto con el Diablo, retrasando hasta límites inconcebibles esta penosa mutación. Carmen Dell'Orefice, por ejemplo, tras 67 años de trayectoria en el mundo de la moda podría considerarse como la modelo más longeva del mundo ya que, habiendo cumplido ya 84 años, continúa apareciendo en las portadas de las revistas de moda que son todo un referente en el sector, como cuando tenía 15 años.
Con su pelo plateado, las cejas erguidas y una mirada de infarto, la modelo continúa embrujando a fotógrafos y diseñadores, siendo requerida para numerosas campañas publicitarias y algún que otro desfile. De un tiempo a esta parte la hemos visto desfilar para Gaultier, Galliano y Mugler, y también protagonizar uno de los visuales publicitarios de Rolex.
A Carmen la descubrió la mujer de Herman Landschoff, un fotógrafo que trabajaba para la revista Harper's Bazaar, bajando de un autobús en Nueva York en 1947. Antes de posar frente al objetivo de los mejores fotógrafos del siglo XX - desde Cecil Beaton, a Norman Parkinson, pasando por Richard Avedon, Dell'Orefice posó también para Salvador Dalí a cambio de 7 dólares.
Eileen Ford, fundadora de la agencia Ford Models - agencia con la que trabajó durante 60 años -, la seleccionó como una de las 15 modelos más importantes que ha dado la industria de la moda de todos los tiempos.
Hija de un músico italiano y de una bailarina húngara, Carmen tuvo una infancia difícil y precaria. Casada y divorciada en tres ocasiones, esta mujer incombustible asegura que la madurez es otra etapa que hay que vivir con sabiduría y serenidad, sin renunciar a los placeres sencillos de la vida.
Via | Digital Fashion Week 2015
En Trendencias | ¡Dejad paso a las veteranas! 30 modelos viviendo un déjà vu
Ver 14 comentarios