"He aumentado un par de kilos de un día para el otro": estas son algunas de las posibles causas de tu cambio de peso injustificado

Para muchos la báscula puede convertirse en su peor enemigo, y es que es una herramienta muy usada en época de dieta. Muestra el peso corporal de cada uno, siendo un parámetro que se suele mirar con regularidad y relativa frecuencia si hay la intención de adelgazar. Sin embargo, el peso puede variar de manera muy volátil y hoy os explicamos -con la ayuda de nuestros compañeros de Vitónica- las posibles causas de estos cambios de peso sin justificar.

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Objetivo adelgazar de aquí al verano: sin recurrir a dietas milagro y haciendo bien las cosas

El peso no es determinante a la hora de saber si hemos engordado o no

Aunque para muchos el peso es el parámetro más importante -quizás porque es accesible y fácil de evaluar-, lo cierto es que en sí el peso no lo dice todo. Desde Vitónica aseguran que más allá de los kilos que aparecen en la báscula, es importante considerar los centímetros de cintura, la pérdida de grasa o la ganancia de músculo, ya que estos factores pueden implicar importantes cambios en nuestro organismo.

Lo importante es considerar los centímetros de cintura, la pérdida de grasa o la ganancia de músculo (Foto: Pavel Danilyuk para Pexels)

Por estos motivos, aunque podemos evaluar el peso cada semana, se recomienda no subirse a la báscula cada día ya que los números que aparecen en ella son muy variables -y mucho menos darle gran importancia-. Si nuestro objetivo es adelgazar de aquí al verano, podemos lograrlo sin recurrir a dietas milagro y haciendo bien las cosas. Y es que las dietas estrictas acaban escondiendo peligros para nuestra salud.

Causas y motivos que pueden hacer que subamos dos kilos de un día para otro

Aunque la báscula diga lo contrario, hay que saber que no es posible subir dos kilos de grasa de una día para otro. El cambio brusco en el dígito puede deberse a múltiples factores. Hoy en día, es posible adquirir básculas que midan el peso corporal, el índice de masa corporal y el porcentaje de grasa.

Ingesta rica en sodio y/o azúcares. Si en las últimas horas has ingerido un plato que contenía muchos azúcares o sodio, es posible que nuestro cuerpo retenga una mayor cantidad de líquidos. Esto puede hacer que nuestro pese aumente dos kilos, pero eso no implica que nuestra grasa corporal aumente.
Estreñimiento. Si sufrimos de estreñimiento y nuestro intestino no evacúa de manera completa, podemos experimentar inflamación y, de nuevo, retención de líquidos.
Estar en pleno periodo premenstrual o menstrual. Las 24h y 48h previas al periodo menstrual se suele retener muchos líquidos a causa de los cambios hormonales. Éstos pueden traducirse en un aumento considerable de peso de manera repentina.

No es posible subir dos kilos de grasa de una día para otro (Foto: Annushka Ahuja para Pexels)

Consumo elevado de agua y un entrenamiento intenso. Si eres d ellas que se ha pasado entrenando de manera intensa y ha tomado mucha agua, es probable que los músculos se encuentren congestionados y/o inflamados. Nuestro cuerpo retiene más líquido de lo normal, pudiendo ser esta la causa de nuestro aumento de peso.
Fallos en el metabolismo. Existen determinadas patologías pueden favorecer la retención de líquidos al alterar el equilibrio de agua y electrolitos. De este modo, las fallas en el funcionamiento renal o alteraciones a nivel cardíovascular pueden provocar cambios repentinos en nuestro peso.

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Que la báscula varíe de peso de un día para otro no significa que hemos aumentado de peso. Por ello se recomienda pesarse una vez a la semana.