La reina Letizia no puede bajar a comprar el pan ni ir de tiendas cualquier tarde soleada. No puede tomar cañas en la Latina, ir al cine con sus amigas y mucho menos salir de parranda por cualquier discoteca de Madrid. La vida de una reina, digan lo que digan, no es nada fácil. Todo esta vigilado, medido al milímetro y más que controlado en la realidad de la esposa de Felipe VI. Y sí, ella también echa de menos su vida anterior.
Es inevitable extrañar el anonimato. Felipe nunca lo ha tenido, pero Letizia sí lo ha saboreado. Sabe lo que es disfrutar de un paseo sin temor a las cámaras o pasarse con las copas una noche tonta. Esos pequeños placeres de la vida que solo los mortales más humildes podemos disfrutar, los ha vivido la reina. Quizás por eso, la madre de Leonor se esfuerza por recuperar un pedacito de aquella intimidad que ahora no tiene.
Hace unos días, la vieron comprando en Zara acompañada por su estilista personal. No había medios, periodistas ni revuelo alguno. Fue un plan privado para el que Letizia se vistió de manera estratégica. Sencilla, casual, de calle. Como uan ciudadana más, la reina entró en la tienda y se lanzó a las rebajas. Según Informalia, según Telva, se llevó dos bolsas de considerable tamaño.
Pero no este el único plan que Letizia ha hecho de incógnito. Si echamos la vista atrás, descubrimos su largo historial de 'escapadas'. En diciembre de 2021, salió de Zarzuela con su propio coche, aparcó en Menéndez Pelayo y recorrió la Feria del Libro de Madrid como una más. Dos escoltas la vigilaban en la distancia. Tal y como publica Vanitatis, paso inadvertida.
Doña Letizia
En una ocasión, los monarcas también salieron de palacio para disfrutar de una noche en Malasaña. Acudieron primero al cine a ver 'Irrational Man', de Woody Allen, y luego cenaron en un restaurante de llamado Gumbo, ubicado en la calle del Pez, tal y como recuerda el citado medio.
También en 2015, los reyes acudieron al circo del sol sin que nadielo esperase. Pero lo más llamativo, sin duda alguna, ocurrió en 2012. Letizia vivió entonces una noche rockera en el concierto de los Planetas, en el marco del festival Primavera Club, celebrado en el Matadero de Legazpi, en Madrid. En enero de ese mismo año, madrugó para entrar en Zara y hacerse con alguna prenda de descuento. ¡Tela marinera!
Fotos | Gtres
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