Este pueblo pesquero de casas encaladas y playas azules es el Santorini portugués y está a solo una hora y media de España

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Si, por mucho que viajes, te sigue pareciendo que no hay ningún lugar como el Mediterráneo y no lo cambiarías por nada, te va a enamorar este particular pueblo costero que fusiona lo mejor de la península ibérica con lo mejor de la isla griega de Santorini. Y es que en el Algarve existe una playa que está considerada el Santorini portugués, pero sin las masificaciones. Se trata de Burgau, un antiguo pueblo de pescadores que ahora vive principalmente del turismo.

El Algarve se compone de unos 200 kilómetros de costa, más de 115 preciosas playas, 91 de ellas con bandera azul y 48 con accesos para personas con movilidad reducida. Pero esta región del sur de Portugal tiene mucho más que fantásticas playas de aguas transparentes: hay temperaturas agradables durante todo el año.

Uno de los pueblos que forman parte de estos números es Burgau, en el municipio Vila do Bispo. Su principal atractivo es la playa, rodeada de colinas que la protegen de los fuertes vientos de Barlavento. De este modo, el arenal se extiende a lo largo de una pequeña ensenada resguardada de la intemperie.

 

Hacia el este, el gris acantilado se hace más alto, tallado en calizas y margas, y muy desgastado por el agua. La orientación del arenal y la disposición de los acantilados brindan abrigo de los vientos y permite baños tranquilos.

Además, la Praia do Burgau también funciona como puerto pesquero, en el que todavía se practican formas artesanales de pesca que son artes como la nasa, la red de enmalle o el aparejo de anzuelo.

En sus acantilados se avista una fortificación del siglo XVII y las ruinas de una altanera torre del siglo XVI. Los coloridos barcos de pesca y los abruptos acantilados contrastan, por otro lado, con sus casas encaladas.

 

Su estrechas calles adoquinadas y distribución laberíntica terminan de rematar su encanto. Por no hablar de que en sus restaurantes se pueden degustar exquisitos platos de pescado y pulpo fresco.

Hay que tener en cuenta que su pequeña playa desaparece casi por completo cuando la marea está alta, por lo que vale la pena consultar las tablas de mareas antes de ir. No obstante, la playa ha sido galardonada con una Bandera Azul y se encuentra entre las 10 mejores del Algarve.

 

Foto de portada | Turismo Algarve

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