Siempre, absolutamente siempre, hay días negros. Uno se levanta y nota algo distinto en el ambiente sabiendo que ese día será especial (y no en el buen sentido precisamente). Podemos resignarnos y dejar que todo vaya de mal en peor o podemos encararlo y mirarlo a los ojos mientras nos vestimos con mucho estilo. Eso sí, en tonalidad oscura.
Al trabajo
Ir al trabajo es una obligación pero de nosotras depende el hacerlo derrochando glamour por cada poro. Un traje pantalón oversize puede ser una buena idea, más cuando detalles como un cinturón alto definen nuestra figura.
Con una falda
Apurando los últimos días de verano (si tenemos la suerte de que el buen tiempo no nos abandona de repente) podemos recurrir a las minifaldas. De piel, algodón o jungando con los tejidos. Mezcladas con chupas de cuero, camisetas de algodón y zapatillas deportivas logramos una mezcla atrevida y perfecta. ¿Te animas?
Cómoda, femenina y con vestido
Los vestidos siempre son la mejor opción: con muy poco logramos estar perfectas, cómodas y femeninas y se requiere poca imaginación para lograr un efecto positivo.
¿Indecisa?
Aunque siempre hay chicas indecisas que los días negros no saben qué hacer. ¿Una falda encima de un vestido? a veces las mezclas extrañas pueden salir bien... Pero solo a veces.
Y tú, ¿tienes un día negro?
Fotos | The chronicles of her, Lisa R VD, Look de pernille, Come over to the dark side
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