Inmortalizadas por el fotógrafo inglés Nick Knight - que se hizo famoso por ser el autor del vídeo o más bien del corto (pues duraba siete minutos) “Born this Way” de Lady Gaga -, las modelos Candice Swanepoel y Lily Donaldson nos ofrecen una brillante capsule collection concebida por Jack Borkett en colaboración con el director artístico Ronnie Cooke-Newhouse, para presentar la nueva colección primavera-verano 2013 de Swarovski.
En vez de las habituales piezas de bisutería, estas imágenes nos desvelan una Candice Swanepoel y una Lily Donaldson luciendo accesorios de uso común, pero personalizados de tal forma por Swarovski, que han pasado a convertirse en piezas absolutamente fabulosas.
Las modelos comparten protagonismo con objetos ordinarios convertidos en extraordinarios mediante el toque mágico de los cristales Swarovski engarzados en un casco para la moto, una mancuerna, gafas de esquí, guantes o una careta (que recuerda un poco a la de Paulina Rubio), como si se tratasen de valiosos diamantes.
Las top no sólo exhiben las últimas piezas de esta colección, sino que alardean de su fuerza y poderío, a través de un soft maquillaje que pone de manifiesto unos enormes ojos de gato que parecen querer competir con la delicadeza y frescura de un bouquet de rosas y de peonias del que gotean cristales Swarovski como si fuesen gotas de rocío.
Nadja Swarovski, portavoz del grupo Swarovski, comentó en rueda de prensa:
"Queríamos que la campaña capturase el espíritu de la mujer Swarovski, la esencia de la mujer contemporánea: guapa, saludable y fuerte. Porque la mujer actual puede competir en todos los ordenes de la vida, pero también es divertida, y glamourosa. Nick (Knight) ha conseguido representar a la perfección esta premisa. Pero, lo más importante es que se trata de una campaña corporativa que celebra a la mujer moderna y al cristal Swarovski como un ingrediente en el diseño que apoya la expresión creativa".
Por su parte, Cooke-Newhouse comentó que había actuado de puente en esta campaña, de hilo conductor entre la belleza natural de las flores (que necesitan la luz para crecer) y la belleza de los crisales Swarovski que, para lucir en todo su esplendor, también necesitan la luz.
En otras palabras: los cristales pueden parecer diminutos y brillantes, pero no son para pusilánimes. Este es el mensaje que, en mi opinión, ha querido transmitir la firma Swarovski con estas imágenes de fuerte impacto visual. ¿Qué os han parecido?
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