Brad Pitt no solo es una de las mayores estrellas de Hollywood, también es alguien que ha recorrido un largo camino de autoconocimiento, disciplina y transformación personal, del que ha hablado muy sinceramente en una conversación profunda y distendida con Dax Shepard en el podcast Armchair Expert,donde el actor reveló detalles sobre su alimentación, cómo se mantiene en forma, su historia con la adicción, y su relación con la masculinidad y el autocuidado.
Uno de los momentos más sinceros de la entrevista fue cuando Brad habló sobre haber dejado el tabaco por completo. "Treinta años fumando... ya tuve suficiente", dijo con firmeza, señalando que, aunque el consumo de nicotina tiene efectos estimulantes para el cerebro, prefirió cortar con cualquier dependencia.
Además, Pitt reconoció abiertamente que llegó a un punto de colapso emocional y físico: "Estaba de rodillas, en un momento muy difícil... necesitaba reiniciarme", expresó. Durante esa etapa, llegó a vivir sin comer bien, se alimentaba únicamente con Coca-Cola con hielo y marihuana, sin estructura ni cuidado alguno, reconociendo este periodo como una desconexión total de su bienestar, lo cual lo llevó a buscar ayuda y cambiar radicalmente su estilo de vida.
Parte esencial de su transformación vino de su participación en grupos de hombres y reuniones de AA. Según cuenta, estas experiencias lo ayudaron a reconectarse con la honestidad emocional y a compartir sus luchas con otros hombres en contextos de vulnerabilidad: "escuchar a otros compartir su dolor y sus errores me dio permiso para ser abierto... realmente llegué a amar esos espacios", relató. La masculinidad, para él, dejó de ser sinónimo de dureza, y pasó a significar capacidad, autenticidad y trabajo interior.
Una vida llena de trabajo
Brad recordó cómo su padre le inculcó desde pequeño la idea de que "hay que levantarse y hacer las cosas": desde niño, tuvo trabajos y estuvo expuesto a entornos de esfuerzo físico como el manejo de barcos, motocicletas y vehículos en caminos difíciles, un impulso que lo llevó a través del motociclismo, el automovilismo y entrenamientos que implican dominio físico y mental.

Como era de esperarse, Pitt confesó que es fanático del motociclismo, del automovilismo de Fórmula 1 y hasta ha coqueteado con NASCAR. Esta inclinación por los deportes de alto riesgo no es solo por diversión: se relaciona con una forma de canalizar su energía, enfrentar sus miedos y mantenerse disciplinado: "hay una parte del chico de los Ozarks que no se va... crecí rodeado de carreras y destrucción", dijo entre risas, refiriéndose a derbis de demolición y carreras en el lodo.
Pitt también habló de su necesidad constante de retirarse del foco mediático tras terminar proyectos exigentes. Dijo que disfruta de la soledad, incluso cuando está acompañado: "no es la soledad dolorosa, sino el tipo de silencio que me ayuda a recargarme", explicó. Aunque disfruta el trabajo en cine, no se siente cómodo con la promoción, ni con la percepción pública que lo rodea: "no pienso mucho en la percepción. Creo en lo que estoy haciendo, entiendo mi oficio y trabajo duro", reafirmó.
Logrando un equilibrio entre su figura pública y su vida personal mediante una serie de decisiones conscientes que abarcan desde dejar el tabaco hasta entregarse al trabajo emocional, su testimonio ofrece una mirada profunda más allá del glamour, donde está el ser humano que valora el trabajo duro, la introspección y una vida más saludable, física y emocionalmente.
Fotos de Armchair Expert with Dax Shepard
En Trendencias | La película de Brad Pitt ya había ganado 40 millones antes de su estreno gracias a la idea de un productor: convertir al actor en publicidad andante
En Trendencias | Alexander Zverev se sincera tras su derrota en Wimbledon: "Me siento bastante solo en la vida ahora mismo, sufro mentalmente"
Ver 0 comentarios