La princesa Leonor cumple hoy 18 años y eso significa que le ha tocado jurar la Constitución Española ante las Cortes Generales. No es el típico cumpleaños que una anhela tener al alcanzar la mayoría de edad pero es lo que tiene ser la heredera al trono... que la cosa no va de probar el alcohol por primera vez y que te repitan la broma de que ya puedes ir a la cárcel. En su lugar, la hemos visto en una sesión solemne junto a los Reyes, su hermana y diversas autoridades. Un auténtico peñazo si no fuera porque también ha habido espacio para algún que otro pequeño gesto entrañable.
No queda mucho hueco libre para la espontaneidad y la improvisación en unos actos oficiales tan solemnes como los que están teniendo lugar hoy en Madrid. Sin embargo, no se nos ha escapado un emotivo gesto de cariño que nos ha hablado más de un padre y una hija que de un rey y una princesa.
Son casi unos segundos en los que, si uno no es observador, ni repara. Y es que, cuando los presidentes del Congreso y el Senado, (Armengol y Rollán), le han puesto a la princesa Leonor las medallas de ambas cámaras, su padre vigilaba la situación al detalle. Sobre todo, Felipe ha estado en todo momento muy pendiente de que dicho momento no arruinara el peinado de su hija.
De este modo, nada más colgar sobre su cuello las medallas, el rey se ha apresurado a sacarle el pelo por fuera de los cordones a su hija y que pudiera salir perfecta en las instantáneas que los fotógrafos han procedido a tomarle inmediatamente.
Además, una vez han cesado los flashes, el rey se ha vuelto a detener en recolocarle los cordones y la coleta con más precisión. Y es que no nos queremos imaginar los nervios que debe de estar pasando Leonor en un día como el de hoy, así que es muy bonito ver cómo su padre, a pesar de ser el rey, está a su lado cuidándola y recordándole que no está sola ante el peligro.
Foto de portada | Gtres
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