Si yo soy totalmente franca, he de reconocer que no me complico mucho la existencia en cuanto a depilación se refiere. La mayor parte de las veces apuesto por la utilización de cuchillas ya que es la manera más rápida de conseguir una piel suave, sin vello y a la vez sin irritar mi piel.
Hace años deseché por completo a la utilización de la cera, ya sea en su versión caliente o fría, ya que no solamente me irritaba, sino que además se me enquistaban muchísimo los pelitos. El año pasado sí que descubrí un gran gadget de depilación que aunque arrancaba de raíz, no me enquistaba el vello, siendo bastante indoloro, pero también hay que reconocer que para las que estamos acostumbradas a la suavidad continua de una cuchilla, al final, el tener que dejar crecer el pelo para que sea arrancado nos provoca cierta incomodidad.
Por ello, cuando llegó a mis manos el nuevo sistema de depilación I.P.L. de Philips el Lumea serie 9000 reconozco que tuve muy buena vibraciones, sobre todo, con comentarios que me habían hecho algunas de mis compañeras sobre la gran eficacia de modelos anteriores.
Eso sí, también tengo que reconocer que este tipo de herramientas me generan mucho respeto, por lo que nada mejor que contar con las indicaciones de una experta para comenzar a probarlo y, de paso, resolver todas las dudas que me generaba.
Así, he podido hablar con la Dra. Ana María Molina, Dermatóloga en la Fundación Jiménez Díaz que ha tenido a bien resolver cuestiones acerca del uso de este sistema de depilación, comenzando, como no podía ser de otra manera, por las ventajas de este sistema IPL frente a otros.
La principal ventaja de este sistema es que el daño al folículo piloso asociado a una depilación duradera se minimiza con respecto a otros sistemas de depilación, como la cera o la electro depilación. Es decir, normalmente dividimos las técnicas de depilación en aquellas que destruyen el tallo piloso desde la raíz como la cera, depilación con pinzas, láser, hilo, etc. y aquellas que simplemente lo cortan, como el rasurado con cuchilla o las depiladoras eléctricas. Por eso, en función de si la técnica depilatoria destruye o no el folículo piloso hablamos de depilación definitiva o temporal. Por ejemplo, la depilación láser o la electro depilación (quemar el pelo con un electrodo caliente que se introduce en el folículo) serían permanentes, mientras que la cera, el hilo, etc. serían depilaciones temporales.
Pero es que si comparamos esos sistemas de depilación, hay que tener en cuenta lo que nos continúa diciendo la Dra.: "la depilación con cera tiene la ventaja de que es duradera, pero no definitiva, aunque si traumatiza el pelo al arrancarlo, debilitándolo a la larga. Lo malo es que la cera se lleva por delante parte de la capa superficial de la piel, provocando una inflamación que puede favorecer el desarrollo de pigmentación inflamatoria, muy frecuente en la zona del labio superior en mujeres. Esto lo vemos especialmente con las tiras de cera fría. También es frecuente con este tipo de depilación la aparición de foliculitis o “vellos enquistados”. La electro depilación consiste en aplicar un electrodo caliente que quema cada pelo y su folículo, por lo que es definitiva, e ideal para pelos sueltos de tipo hormonal o pelo blanco que aparece en mentón o labio superior, lo malo es que puede dejar cicatrices puntiformes permanentes. Todas estas “consecuencias” se reducen con la depilación IPL."
Por lo tanto, vemos que la depilación con gadgets de este tipo son ideales para acabar con el pelo pero sin que la piel sufra.
Cómo preparamos la piel para usar un sistema de depilación IPL
La Dra. Molina nos comenta que "Philips Lumea puede usarse tras una depilación previa con cera o con cuchilla, y eso aporta gran comodidad y flexibilidad al tratamiento. Sin embargo, los resultados más eficaces se obtienen cuando el método de depilación es con afeitado, ya que el tallo piloso pigmentado (cargado de melanina) que queda por debajo de la piel ejerce de transmisor de la energía hacia la base del folículo piloso aumentando así la eficacia de la depilación. Es importante recordar que en las primeras sesiones será necesario realizar una depilación previa al tratamiento con Philips Lumea, pero si seguimos el protocolo recomendado de forma adecuada, al cabo de unas sesiones, que variarán de forma individual, el crecimiento del cabello estará tan ralentizado que podremos realizar el tratamiento directamente, sin necesidad de depilación previa".
Por lo tanto, únicamente tenía que seguir mi sistema de depilación habitual, pasarme la cuchilla para luego aplicar Philips Lumea. Y así lo hice.
Precauciones con los lunares
Una duda fundamental que me surgió es sobre si este dispositivo se puede usar sobre los lunares y, más concretamente, sobre esos pelitos que crecen sobre los mismos a lo que la la Dra. Ana María Molina indicó que lo ideal es no hacerlo, ya que "los lunares contienen melanina, el mismo pigmento que actúa como cromóforo en la depilación con luz pulsada o láser, es decir, como diana de la energía o luz. De forma que el lunar captará energía de la luz pulsada y esta energía se transformará en calor que quemará el lunar".
Igualmente, nos recuerda, en base al funcionamiento de este tipo de sistemas de depilación que si el pelo no contiene casi melanina, es decir, el pelo canoso, o es un tipo de melanina especial, como la que producen los pacientes rubios o pelirrojos, el láser no será efectivo, habrá que recurrir a la electro depilación.
Mientras, para el pelo de los lunares, nos indica que "lo que recomendamos es cortarlos con una tijera, no arrancarlos de raíz, porque entonces podemos favorecer la aparición de “foliculitis subnévica” que no es más que al crecer el pelo quede enquistado en el lunar y se infecte. Mejor cortarlos, porque como ya sabemos el pelo no va a crecer más fuerte ni más rápido por cortarlo".
Precauciones de uso y posteriores
Según nos dice la experta Dermatóloga, lo ideal es que nuestra piel siempre esté limpia y seca antes de realizar cualquier tratamiento de depilación. Además, "después de la depilación es conveniente aplicar una buena crema hidratante para reparar los daños ocasionados por la depilación (erosiones superficiales en caso del afeitado, inflamación y pequeños sangrados en el caso de la cera, etc). Además, si se ha realizado fotodepilación esta crema hidratante se puede aplicar fría y así podremos contrarrestar el calentamiento provocado en nuestra piel".
Y, por supuesto, ahora la duda que nos surge con la llegada del verano es si podemos tomar el sol si estamos usando un sistema de depilación IPL, a lo que nos dice...
Philips Lumea puede usarse en todas las épocas del año, lo cual es una ventaja importante frente a otros métodos de depilación profesional. Aunque mi recomendación es que comiences el tratamiento durante el invierno, otoño o primavera, para que así al llegar el verano tu piel luzca suave y sin pelo. Si estás morena, el sensor detectará tu tono de piel en esa zona y automáticamente ajustará la intensidad a una menor para evitar quemaduras o cualquier tipo de molestia durante la sesión. Además, se recomienda esperar 48 horas antes de utilizar Philips Lumea si hemos estado tomando el sol activamente y no volver a tomarlo hasta 24 horas después de realizar una sesión.
¿Es seguro aplicarlo en la cara?
Otra de las grandes cuestiones que me surgieron fue esta: si podía usarlo en la cara, concretamente, en la zona del bigote. Y es que si era capaz de terminar con ese vello que, personalmente, me parece súper indeseado, pues mejor que mejor.
La piel de la cara es más sensible y está más vascularizada, por ello es importante utilizar el accesorio adecuado para la cara, ya que incorpora filtros especiales UV que aportan una protección adicional en esta zona. Además, es importante recordar la precaución de no usar Philips Lumea para eliminar cabello en la región periocular. Con Philips Lumea no es necesario usar ningún tipo de gafa protectora, aunque lo ideal es utilizarlo en una habitación bien iluminada, para que el parpadeo del disparo sea menos notorio y, por tanto, la sesión más cómoda. Una precaución a tener en cuenta siempre que vayamos a realizar una depilación de la zona facial, con cualquier sistema de depilación (afeitado, cera, láser) es suspender y evitar tratamientos antiacnéicos o antienvejecimiento ya que la mayoría de estos tratamientos incorporan ácidos u otras sustancias orientadas a realizar un peeling superficial de la piel, lo cual hace que la piel esté mucho más sensible al tratamiento y pueden producirse quemaduras y otros efectos secundarios indeseados como pigmentaciones.
La regla de oro, como nos indica la Doctora, es no utilizar métodos de depilación muy agresivos, adecuar el dispositivo a tu tono de piel, y usar fotoprotección estricta si se ha observado inflamación o eritema importante tras el tratamiento.
¿Qué ventajas para la piel y en cuanto el uso tiene este nuevo gadget sobre otros?
En el mercado son muchos los aparatos que nos encontramos, por lo que, a la hora de elegir uno u otro, este de Philips sería una buena opción por lo que nos explica...
El sensor SenseIQ es una tecnología integrada en Philips Lumea que automáticamente es capaz de detectar nuestro fototipo (tipo de piel según su color) y en función de ello adecuar la intensidad de la energía en cada zona. Por eso es importante utilizarlo en las diferentes zonas a tratar, así como usar el accesorio adecuado para cada zona, ya que así obtendremos la mejor eficacia del tratamiento y, lo más importante, la seguridad.
En este mismo sentido, Luis Suárez Rueda, Responsable de Comunicación de Philips Personal Health nos comentó que "la depiladora IPL Lumea Serie 9000 de Philips incorpora la tecnología SenseIQ a través de la cual el dispositivo analiza el tono de piel y adapta la intensidad del pulso para ofrecer el mejor resultado, cuidando al máximo la piel de la usuaria. Estudios avalan que Lumea Serie 9000 es capaz de reducir en hasta un 92% el vello en tan solo tres sesiones y además cuenta con accesorios curvos que se adaptan a las formas del cuerpo permitiendo que la aplicación de la luz llegue de manera óptima a la zona a tratar."
Mi experiencia con Philips Lumea 9000
Una vez resolví todas mis dudas sobre el uso de este aparato, solo me quedaba ponerlo en funcionamiento y, concretamente, lo hice en medias piernas, axilas y zona del bigote. Llevo tres sesiones y el resultado no ha podido ser más satisfactorio.
En primer lugar, tengo que destacar que se trata de un gadget muy cómodo. No pesa, es muy ergonómico, fácil de usar, que cuenta con cuatro cabezales indicados para cada zona con un dibujo (no tiene pérdida) y que, únicamente tenemos que dejar que sea el sensor el que detecte nuestro tipo de piel, seleccionar el que nos indique y comenzar a aplicarlo.
Además, se puede usar tanto enfuchado como de forma inalámbrica, por lo que no veáis qué fácil es usarlo, sin necesidad de estar al lado de un enchufe. Este punto es un plus muy importante, os lo aseguro.
En cuanto a su uso, como os decía, no puede ser más fácil, rápido y seguro. Y es que a mí una de las cosas que más me preocupan de estos dispositivos es si los uso bien, si pongo el rango correcto de piel y similar. Pero con el Philips Lumea 9000 esto no pasa gracias a la comentada tecnología SenseIQ. Así, solo tenemos que encenderlo, pulsar sobre el botón de la lupa, colocarlo en la piel de la zona a tratar y él solo te indica qué intensidad (numeración) tienes que utilizar, lo que te da una tranquilidad asombrosa.
Decir que tiene cinco niveles disponibles que, por supuesto, también se pueden ajustar manualmente, pero sinceramente, eso no lo he probado, para qué elegir si me lo elige correctamente la propia máquina.
En cuanto al tiempo de uso es muy muy rápido. Las axilas en 5-6 pulsaciones lo tienes hecho, lo que se traduce en menos de un minuto; el bigote en unas 3 pulsaciones; y las piernas (en mi caso medias únicamente), tardaría unos 10-15 minutos por pierna ya que es una zona más amplia y tienes que ir poco a poco. Pero vamos, que no tardas nada de nada, lo que es otro gran punto a su favor.
Es indoloro, notas como un pequeñísimo calambrazo, pero que no duele nada, ni la zona se me ha puesto roja, ni nada por el estilo, por lo que la prueba de la piel sensible la ha pasado con nota también.
Como os comentaba, han sido tres las sesiones que me he dado, lo que se traduce en mes y medio (una cada 15 días) y tengo que deciros que, a estas alturas, en las axilas ya solo me salen pelitos rebeldes, casi a modo anecdótico, porque por lo demás, han casi desaparecido. En las piernas, por ahora, tengo algunos pelitos rebeldes más y lo mismo en la zona del bigote, pero es cierto que tardan como más en salir, no es como antes que casi cada par de días me pasaba la cuchilla por las piernas.
El primer periodo comprende entre 4-5 sesiones, por lo que lo seguiré usando con muchas ganas. Además, sabiendo que se puede usar estando morena y que no hay que esperar una semana para aplicarlo tras tomar el sol, mejor que mejor. Eso sí, tengo claro que si a estas alturas mi vello se ha reducido de forma muy significativa, tengo muchas esperanzas de que me deje pasar el verano despidiéndome de la depilación.
Según cuentan desde la marca, tras este primer ciclo, bastará con repetir los tratamientos cada cuatro u ocho semanas. Así, una serie de 12 tratamientos con Philips Lumea te proporcionará una piel suave y libre de vello que dura hasta 6 meses.
Ahora, vistos los buenos resultados, mi próxima apuesta será por la línea del bikini que sí, he dejado para el final, pendiente de iniciar solo si los resultados en el resto del cuerpo eran buenos. Y como lo han sido, vamos a por ello. Lo tengo claro.
Por lo tanto, tras probarlo, me he convencido totalmente de su eficacia, de que es una buenísima opción para acabar con el vello corporal, que es cómodo, rápido, indoloro, fácil de usar y, sobre todo, me da confianza.
En cuanto a su precio sí, es caro, cuesta 449 euros, pero poder decir adiós al pelo desde casa de esta forma, creo que podría merecer la pena la inversión.
Depiladora luz pulsada Philips Lumea S9000 para cara, cuerpo y zonas sensibles SenseIQ
El producto fue facilitado para la prueba por Phillips. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas para más información.
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Fotos | Trendencias y unsplash
