Continuamos la temporada de premios haciendo repaso de todas las alfombras rojas internacionales más alucinantes y glamourosas. Hace unos días los Globos de Oro nos dejaron una noche totalmente en negro (por una buena causa) y demostraron que ese total black se puede llevar a las mil maravillas o patinando. Ahora es el turno de los Critics' Choice Awards 2018 y de echar un vistazo a los looks que menos nos han gustado de esta edición.
Heidi Klum de Georges Hobeika
La top model no acertó el domingo y ha vuelto a patinar esta noche con un vestido de Georges Hobeika que resultaba demasiado excesivo. El escote, la abertura de la falda, las mangas y los adornos bordados al vestido eran sencillamente too much, incluso para ella. Tampoco ha acompañado el maquillaje, en tonos nude, que se ha quedado algo apagado y triste.
Elisabeth Moss de Erdem
La actriz de El cuento de la criada ha escogido un diseño semitransparente de plumeti de Erdem, con flores creadas a base de embellishement. Pero la talla era demasiado pequeña y el vestido le queda muy estrecho en la zona del escote, creando arrugas y formas muy forzadas. Con una talla más habría estado espectacular.
Alexis Bledel de Rasario
La actriz ha escogido un diseño estructurado muy minimalista, de tirantes y en colour block azul y negro. Es muy sofisticado y elegante, pero se queda muy soso y apagado en comparación con otros looks de la alfombra roja. Esta vez, nuestra chica Gilmore favorita se ha pasado de sobriedad.
Haley Bennett de Chloé
Sobre la pasarela parecía pasable, pero este vestido de Chloé parece recién sacado de los años 2000. La falda de volantes midi, esos botines con lazada y, sobre todo, el escote con cremallera a lo "busco a Jack". Si a eso le sumamos el bolsito monedero de aires provenzales, es un no rotundo.
Emilia Clarke de Dolce&Gabanna
Daenerys nos encanta y su colaboración con Dolce&Gabbana todavía más. Pero de todos los vestidos de la firma que podía escoger ha optado por uno muy poco favorecedor para ella. La actriz es bajita y estaría más guapa con un vestido corto o uno largo hasta los pies, pero esa longitud no le hace ningún favor. Eso sí, ha llevado total black en honor a la iniciativa #TimesUp y eso le hace ganar muchísimos puntos.
Reese Witherspoon de Prada
Reese Whiterspoon suele jugar sobre seguro y nunca arriesga demasiado con sus looks, pero en esta ocasión ha optado por un Prada demasiado casual y juvenil para una gala como esta. El corto del vestido y el diseño estilo pichi la han dejado muy atrás en el ranking de estilo de la noche.
Kaley Cuoco de J.Mendel
A la actriz de Penny le pasa lo mismo que a Heidi Klum, que siempre se pasa de frenada. En este caso, incluso más que la top model. El vestido en rosa millennial lleno de volantes, costuras deshilachadas y lentejuelas es demasiado ostentoso y con un toque Barbie que parece sacado de Paris Hilton.
Alison Brie de Roberto Cavalli
Alison Brie puede estar espectacular, ya lo vimos en los Globos de Oro. Pero en esta ocasión ha fallado todo: ese amarillo pastel recuerda demasiado al vestido de la Bella y apaga mucho su color de piel. Pero además, el escote fruncido y lleno de pliegues y telas entretejidas no resulta nada favorecedor.
Fotos | Gtres, @guysandpeople.
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