Esta semana el centro de la moda ha estado en París, en esta maravillosa ciudad, mi preferida, dónde se ha celebrado la Semana de la Moda de París. Muchas invitadas de renombre han acudido a ver las propuestas del próximo verano de sus diseñadores preferidos.
En este caso, la elegida, acude a los desfiles, no sólo porque le gusten, sino porque es la directora de Vogue Francés, la revista de moda más prestigiosa. Ya sabéis de quien hablo: Carine Roitfeld. La editora acudió al desfile de Givenchy, dede dónde le mandaron un estiloso y elegante abrigo negro de la firma, de la colección Primavera-Verano 2009 antes de que se presentase esa tarde en el desfile. Y es que siempre ha habido clases.
Lo mejor de su look fueron las maravillosas botas de taconazo, y esto sí que es un tacón XXL, y cremallera trasera, de la Maison Martin Margiela. Además, se ajustan a la pierna, que es como más bonitas quedan y cómo se lucen de verdad. Me encantan, ¿no os parece?
Al desfile cuadió acompañada de su hija Julia que eligió para la ocasión un vestido negro de YSL un poquito ligerito y que yo nunca llevaría a un desfile. Pero vamos, que la elegida es la madre, no la hija.
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