Si tienes Android y te ves en la famosa situación de que te estas quedando sin batería en el móvil pero no llevas encima el cargador, existe una forma de cargarlo sin cables ni bases inalámbricas que puede salvarte el día y que te vamos a contar con todo lujo de detalles a continuación. De hecho no vas a necesitar ni enchufe.
Ni toma de corriente, ni ordenador de mesa ni portátil, para cargar el móvil de forma alternativa a la tradicional, lo único que necesitas es la función "carga inversa inalámbrica". Es exclusiva de terminales Android y permite transferir la energía de un móvil a otro teléfono o accesorio solo con juntar las baterías de ambos equipos.
Aunque, por ahora, se trata de una función que se encuentra disponible, sobre todo, los dispositivos más modernos y de alta gama. Por lo que, si tienes la suerte de contar con terminales que soportan la carga inversa inalámbrica y uno de ellos tiene todavía un buen porcentaje de pila (no resulta aconsejable entregar batería por debajo del 20-30%), estos son los pasos que tienes que seguir para usarlo de power bank para alimentar al otro.
Cómo cargar un móvil con carga inversa inalámbrica
Cuando un móvil cuenta con carga inalámbrica inversa, lo habitual es que deje activarla desde las opciones de batería. Una vez encendida dicha opción hay que darle la vuelta al teléfono y colocar encima el otro móvil (o dispositivo como auriculares, reloj...). Tras ponerse en contacto ambas bobinas de inducción se establecerá la pasarela por la que se transferirá la energía.
Eso sí, hay que tener en cuenta que es una carga poco eficiente debido a la energía que se pierde en forma de calor. Además, a menudo cuesta encontrar el punto exacto de carga y para lograr que se establezca la carga inalámbrica entre dos dispositivos hay que moverlos hasta que las bobinas están correctamente alineadas.
Por último, es fácil que se pierda el contacto. Esto es algo que pasa, sobre todo, cuando los teléfonos no están correctamente posicionados.
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