Las buenas cifras del paro son una realidad y es que, según los últimos datos del INE de diciembre de 2024, mejoró un 9,3% respecto a 2023, cerrando el año con 21.857.900 ocupados y menos de 2,6 millones de parados en nuestro país.
Si acotamos un poco la búsqueda y nos fijamos en el colectivo sénior, vemos que las cifras también acompañan y que los datos de desempleo y ocupación tuvieron una ligera mejoría, pero aún así esta franja de desempleados siguen siendo un 20% del total de los parados del país.
Y es que, del total de 2.595.500 parados de 2024, 505.700 tienen 55 años o más, lo que significa un 4,61% anual menos con respecto a 2023 (y esta era la mejoría a la que nos referíamos). Un dato positivo objetivamente, pero subjetivamente nada alentador para este sector de la población ya que el paro en esta franja de edad parece estar enquistado y no hay manera de que salga hacia adelante.
Concretamente, si vemos las cifras del paro entre las edades comprendidas entre los 25 y los 54 años, vemos un rebaja del paro anual del 10,50%, una cifra más positiva que la de los senior, entonces, ¿cuál es la lectura que hacemos? Que, a pesar de las cifras positivas de los mayores de 55 en el paro con respecto a 2023, las de la franja de edad por delante de la suya son mejores, lo que nos hace pensar que las empresas siguen apostando por perfiles de trabajadores de menor edad. Incluso, estas parecen haber mejorado entre los más jóvenes, debido al gran descenso del paro entre los 20 y 24 años con una cifra del 12,36% anual menos que en 2023.

Las mujeres son más del 50% de los mayores de 50 con paro de larga duración
Asimismo, las que peor paradas salen, como viene siendo norma, son las mujeres y es que, las mayores de 55 años a finales de 2024 eran 268.100, con una reducción del empleo anual del 5,37% pero, pese a estos datos, siguen siendo más del 50% del desempleo sénior, según los mismos datos del INE.
Expertos de plataformas especializadas en esta problemática, como Generación Savia, confirman que, a pesar de la mejora laboral generalizada en España, "el desempleo sénior sigue siendo un problema complejo que afecta principalmente a las mujeres mayores de 50 años, quienes representan el 54,26% (431.000 mujeres) del total de parados sénior, frente al 29,7% (366.000 personas) de los hombres", según recoge 65ymas.
El edadismo en el mundo laboral se adelanta a los 45
Normalmente, el mayor obstáculo que tiene este sector es el edadismo en el mundo laboral y, a menudo, se duda de su capacitación la brecha generacional, la brecha digital, la flexibilidad para aprender... Aunque también se presta atención a las razones que justifican el nuevo empleo de los sénior, si atendemos a las anteriores cifras, como son la falta de relevo intergeneracional, la escasez de talento o el retraso de la edad de jubilación, entre otros.
Sin embargo, también estamos viendo que otro grupo está siguiendo de cerca a los mayores de 50 y esos son los de 45 y es que para el mercado laboral esta edad ya se estaría considerando como sénior.
Según los datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), los mayores de 45 años fueron empleados tan solo 333.531 en diciembre, frente a los 369.603 de noviembre y 422.262 de octubre). Y es que, tal y como afirma Help Age España, el paro de larga duración no solo se ceba con los mayores de 50 sino también con los de 45 en adelante.
Foto | Mikhail Nilov RDNE Stock project en Pexels
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