Mientras que el resto de diseñadores han apostado por el negro y por los colores oscuros en esta época de crisis, Dries Van Noten ha tomado el camino contrario y ha diseñado una colección para el próximo Otoño-Invierno 2009/2010 de lo más colorida.
Tonos pastel, beiges e incluso tonos más vivos como el naranja se combinan entre sí, en una mezclas que aparentemente no deberían funcionar tan bien como lo hacen.
Además, hay mezclas de texturas, de tejidos más suaves con tejidos más rugosos, de lana con pailettes brillantes, de cuero con satén. Las telas también se entremezclan, combinando en un mismo top un tejido liso con un tejido con estampado animal en tonos grises.
En cuanto a las prendas, se llevan sueltas, cómodas, de una manera relajada que permite total libertad de movimiento.
Los abrigos son lo mejor de la colección. Se llevan anudados a la cintura, a modo de batas masculinas.
Y las prendas aunque aparentemente sencillas, llevan un corte al bies que transmite movimiento y caída al tejido. Vionnet estaría orgullosa de que sus discípulos manejen tan bien el corte al bies que ella puso de moda hace ya casi un siglo.
Toda la colección destila un estilo entre retro y actual de elegancia relajada que convencerá a muchas mujeres. Lujo sin estridencias para combatir la crisis.
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