Como cada año por esta época, la marca de joyería milanesa Pomellato añade un toque extra a su colección Pomellato Pom Pom. Según Andrea Morante, CEO de la marca, la colección Pomellato Pom Pom - creada en el 2008 para celebrar el cuarenta aniversario de Pomellato -, nació con vocación de rompler las reglas de la alta joyería internacional. Razón por la cual, los connaisseurs y fans de la marca esperan con expectación este importante acontecimiento anual.
Joyas sofisticadas, excesivas y contemporáneas que unen anticonformismo con una libertad estilística total, en consonancia con el espíritu de esta marca que, desde siempre, se ha distinguido por su ironía y ligereza. Las nuevas piezas parecen querer explotar en un estallido de color y de energía. Como, cabe suponer, se tratan de ediciones limitadas, realizadas a mano por los maestros artesanos joyeros que trabajan en los talleres milaneses de la marca.
Este año, el mot de passe es el color de los trópicos y su exuberante vegetación expresados por medio de vivos colores proporcionados por multitud de piedras preciosas engastadas a mano formando un inusual pavé, en el que cientos de gemas de tamaño irregular se van ensamblando por medio de un complejo y minucioso trabajo artesanal.
Las nuevas pulseras se declinan en zafiros, tanzanitas, zafiros púrpura, aguamarinas, turmalinas Paraiba, tsavoritas, esmeraldas, turmalinas canario, granates mandarina, espinelas roja y zafiros rosa. Esta exuberante visión recuerda el estilo tropical, muy popular en la década de los años 30 en Brasil, y que la simpar Carmen Miranda lució como nadie, durante sus primeros años.
Con la colección Club Tropicana, Pomellato vuelve a romper las reglas, para crear nuevos e inesperados cánones y apasionados deseos.
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