Las castañas son un alimento clásico del invierno, y ahora que tenemos una freidora de aire en casa, podemos aprovecharla para algo más que hacer patatas fritas y asar en nuestro airfryer unas castañas deliciosas.
Ya te hemos contado las claves para elegir una freidora de aire según tu presupuesto, pero vamos a recordarte nuestras tres favoritas, comenzando por la más económica de todos, perfecta si aún no te has sumado a la fiebre de las airfryer.
La freidora Cecotec Cecofry es una opción con buena calidad precio, con una capacidad de 1,5 litros, ideal para parejas, por ejemplo. Con sus 900 W y con un termostato que alcanza los 200º, es versátil y económica, y ahora tiene un precio que ha bajado de 73,90€ a 55,15 euros en Amazon.
Cecotec Freidora sin Aceite de Aire Caliente Cecofry Compact Rapid Moon. 900 W, Dietética, Función Horno, Programable en Tiempo y Temperatura, Termostato, Recipiente 1,5 litros
En el término medio tenemos esta freidora de aire caliente con 6 programas automáticos de Severin que tiene un precio de 83,90 euros, una potencia de 1500 W y una capacidad de 3,2 litros.
SEVERIN Freidora de aire caliente con 6 programas automáticos, freidora eléctrica para freír sin grasa, innovador horno freidora para freír de forma saludable, negro, FR 2430
Cosori tiene una excelente freidora de aire que hasta podemos controlar con wifi y que tiene una capacidad de seis litros (pero unas seis personas). Tiene 11 programas distintos y podemos programarlos hasta 4 horas antes, además de que es capaz de mantener la comida caliente una vez ha terminado, lo cual es perfecto para las personas más ocupadas. En Amazon es la elección más valorada y tiene un precio de 159,99 euros.
COSORI Smart - Freidora de aire caliente con WiFi (5,5 L, XXL, con control por aplicación, pantalla táctil LED, 11 programas, precalentamiento y mantenimiento en caliente, modo batido
Aunque nos encanta la receta de Directo al Paladar de castañas asadas en el horno (la preferimos a la receta del microondas con las que terminan siendo algo más secas), si asamos las castañas con el airfryer consumiremos menos energía y el resultado será también estupendo.
Lo primero que haremos será lavar bien las castañas y secarlas muy bien después. Una vez limpias y secas, haremos un corte en forma de cruz con un cuchillo, para que luego sea muy fácil pelarlas y se cocinen bien. Es importante apoyar la castaña sobre su parte más plana en la tabla de cortar, para evitar cortarnos, y hacerlo lo suficientemente profundo para cortar no solo la piel dura exterior, sino también la interior que recubre la castaña.
Una vez preparadas y cortadas, las colocaremos en la cesta de nuestra freidora de aire. Es importante que no queden amontonadas para que se cocinen uniformemente, y evitar poner varias capas de castañas. Es preferible hacer varias tandas y no meter todas de golpe en la freidora.
Metemos la cesta en la freidora y la programamos a 200º C entre 10 y 14 minutos, según el tamaño de las castañas. A mitad de cocción podemos sacar la cesta y moverlas ligeramente para recolocarlas y que se cocinen todas por igual. Ahora solo nos queda pelarlas cuando aún están calientes (después de un par de minutos fuera de la freidora ya no nos quemaremos) y a disfrutar.
Otras formas de hacer castañas asadas
Además de con la freidora de aire, puedes hacer castañas asadas de la forma tradicional y también en el microondas. Este truco de cocina es muy viejo y típico de las abuelas.
En ambos casos se empieza haciendo una incisión a cada castaña. Si eliges el horno, disponlas sobre la bandeja y si quieres usar el microondas, colócalas en un cuenco apto para microondas con agua durante unos 20 minutos, según el número de castañas y la potencia de tu microondas. También puedes ponerlas en un plato apto para microondas sin amontonar (por lo que cabrán menos) dos minutos a 1000W si tienes menos tiempo.
Nota: algunos de los enlaces aquí publicados son de afiliados. A pesar de ello, ninguno de los artículos mencionados han sido propuestos ni por las marcas ni por las tiendas, siendo su introducción una decisión única del equipo de editores.
Foto | Jana Ohajdova en Unsplash
