La solución al desorden en mi zapatero cuesta 4 euros en Ikea. Me gusta tanto que he comprado dos

Mi armario es enorme y maravilloso, pero tiene una pega: el estante inferior a ras del suelo no da cabida a toda mi colección de zapatos. Intento que estén ordenados, pero en cuanto saco uno del fondo todo se desmorona. Al final acaban apilados de mala manera, ensuciándose y aplastándose unos a otros. Necesitaba solucionar este drama de forma rápida y barata: lo conseguí con este gadget de Ikea. 

El drama de mis zapatos. Mamá, lo siento, no mires.

No solo es el desorden y que los zapatos se estropean. También es el ruido visual que me causa: veo este desastre y me dan ganas de ir descalza. Por eso fiché el estante zapatero Grejig de 3,99 euros en Ikea, una balda de metal con patas plegables que crea espacio extra de almacenamiento. Concretamente, dos pisos de zapatos limpitos y organizados. 

Estante zapatero Grejig

PVP en Ikea — 3,99 €

El precio podría variar. Obtenemos comisión por estos enlaces

Este estante me ha dado un zapatero ordenado y con más espacio. Si os fijáis en la foto, al tener dos pisos se libera la zona frontal del armario, dejando hueco para nuevas adquisiciones de otoño. Tiene 17 centímetros de alto, perfecto para meter debajo deportivas y zapatos con tacón bajo. Además, se pueden apilar dos estantes más encima para aprovechar al máximo la altura del compartimento. 

Ahora sí que sí. Qué gusto, qué orden, qué paz visual.

Me gustó tantísimo que compré otro más para usar en otro armario, el de los botines y botas. Sin embargo, he de confesar que me pasé de optimista, porque esos zapatos son más altos y no entran en dos pisos, hay que doblarles la caña y se deforman. No lo devolví, le encontré una nueva función a la japonesa: usarlo para dejar los zapatos que más utilizo en la entrada y no meter suciedad de la calle dentro de casa. 

Mi zapatero de exterior

Yo lo tengo puesto en el patio de entrada a mi casa y lo recomiendo muchísimo si tienes jardín o una terracita propia. Si vives en una comunidad de vecinos, puedes preguntar si no les molesta ponerlo en el descansillo. O colocarlo en el recibidor nada más entrar, siendo más reducido que un mueble zapatero e ideal para pisos pequeños. 

Ganas espacio, no ensucias la casa y puedes moverlo a tu antojo, en función de la decoración y las necesidades. De verdad que lo amo, hasta se lo he regalado a mi pareja para que ordene (de una vez) sus deportivas. 

Algunos de los enlaces de este artículo son afiliados y pueden reportar un beneficio a Trendencias.

Fotos | Exclusivas para Trendencias. 

En Trendencias | Los trucos infalibles para quitar las manchas amarillas de la ropa guardada.