La primera colección en solitario de Virginie Viard ha apostado por el tipo de artículos que se convierten en super ventas: los pendientes con la doble C, las horquillas con el logo de Chanel, las pulseras, los bolsos cuquis, porque la diseñadora sabe que en el mundo de la moda vales lo que vende tu última colección. Virginie Viard ha conseguido una colección crucero 2020 muy femenina, con detalles como los grandes lazos, las capelinas, o los colores pastel que sientan muy bien al universo Chanel.
Con el Grand Palais convertido en una estación de tren de principios del siglo XX, el escenario del desfile ha sido más sencillo que en otras ocasiones, pero la colección ha tenido momentos muy destacados.
El blanco y el negro habitual en Chanel ha dejado paso colores como los malvas, los azulones e incluso los marrones. Un poco de color siempre es bienvenido. También sorprende ver tanto estampado floral en Chanel si recordamos algunas colecciones que con Karl Lagerfeld a veces alcanzaban la austeridad militar.
Los trajes de tweed típicos de Chanel han estado presentes pero en una versión más relajada, con las chaquetas más desestructuradas y un corte de falda juvenil que sienta muy bien.
Los volantes y las grandes lazadas de las blusas han añadido fantasía a los looks, y también han gustado mucho los trenchs fluidos, los pantalones anchos, y las rebecas de punto. Y una temporada más siguen dejándose ver las mallas ciclista y los leggings estampados.
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