Algo nuevo, algo prestado y algo azul, eso dice la tradición que debe tener todo look de novia que esté completo, aunque es una costumbre romantizada de origen anglosajón. Sin embargo, y teniendo en cuenta las circunstancias, seguro que Tamara Falcó está cumpliendo con todo de forma estricta para evitar cualquier pizca de mala suerte que pueda echar por tierra el esfuerzo de todos estos meses y su historia de amor con Íñigo Onieva.
Chascarrillos y tradiciones aparte, hemos descubierto gracias a Vanity Fair algo que podríamos haber incluido entre los detalles más curiosos de la boda de Tamara Falcó: la tiara que la novia lucirá en su día B mañana a las 19h.
Se trata de una joya familiar, algo prestado, que perteneció a la abuela de la celebrity, madre de Carlos Falcó, anterior marqués de Griñón que le dejó en herencia a la protagonista del reality de Netflix El Rincón, el palacio donde mañana se dará el "sí, quiero".
De acuerdo a las palabras de la publicación, la pieza que llevará la marquesa la usó por última vez su cuñada, Amparo Corsini, cuando se casó en 1999 con el hermano de Tamara, Manuel Falcó, quien la acompañará hasta el altar para llegar junto a Íñigo Onieva.
La tiara, una preciosa joya de los años 20 de estilo art-déco, tiene forma triangular y los bordes redondeados además de estar cuajada de diamantes. El origen de la pieza está 1928, ya que fue un regalo de bodas para Hilda Fernández de Córdoba y Mariátegui, hija de los duques de Arión, cuando se casó con Manuel Falcó y Escandón.
Fotos | @tamara_falco
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