Sarah Jessica Parker nunca podrá olvidarse de Carrie Bradshaw. Ha sido el papel que le ha otorgado la fama mundial y le ha convertido en un auténtico icono de estilo. Ahora vuelve a la televisión con una nueva serie, "Divorce", donde la podremos ver actuar de nueva en la pequeña pantalla. Para la presentación de esta nuevo proyecto se ha vuelto a arriesgar con un diseño de color blanco realmente espectacular.
En esta ocasión Sarah Jessica Parker ha elegido un vestido blanco con detalles por todos lados, desde el bordado sobre encaje de color negro en escote, cintura y mangas hasta los volantes verticales de la falda, algo que sólo ella puede defender de la manera que lo hace. El collar de cristales a lo Anna Wintour y los zapatos de satén de color gris perla de su propia colección cierran un look perfecto para ella. Cuando Sarah Jessica Parker se arriesga es cuando más nos enamora, por lo menos a mí.
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