La cultura pop de los años 90 y 2000 es fuente de riqueza para todos en general y para la Generación Millennial en particular. Una de las parejas más icónicas de la época fue la que formaron los actores Nicole Kidman y Tom Cruise tras conocerse en 1990 en Días de trueno.
Apenas unos meses más tarde decidieron casarse e iniciar una familia, pero tras sufrir problemas para concebir de forma natural y varios abortos, los intérpretes decidieron optar por la adopción para convertirse en padres, y así fue como en 1992 llegó a sus vidas Bella Cruise, la primera hija para ambos.
Quién es Bella Cruise: una joven artista en Londres
De acuerdo a lo que han publicado los compañeros de Sensacine, Isabella, Bella, Cruise se casó en 2015 con el consultor experto en tecnología Max Parker. Y sí, todo parece inventando como cuando Homer pasa a llamarse Max Power en Los Simpsons, pero no, es real.
En la actualidad la pareja reside en Londres, donde estudió peluquería y maquillaje en la prestigiosa escuela Delamar. No obstante, su trayectoria profesional la ha llevado finalmente por otros derroteros, aunque sin alejarse del camino creativo.
Y es que se dedica al arte, al igual que Pax Jolie-Pitt hijo de ya-te-puedes-imaginar-qué-dos-actores, y su mejor galería de exposición es la cuenta de Instagram donde va volcando sus trabajos: @bellakidmancruise. Y oye, qué cosas que a pesar de que no se lleve muy allá con su madre se haya plantado su apellido ahí, en primer plano. Muy poco anglosajón. O quizás mucho con bastantes trazas de Estados Unidos. Ahí lo dejamos, para reflexionar.
Bella Cruise y Nicole Kidman: un amor de madre frustrado
La joven, que este año cumple 32 años, no tiene en la actualidad relación con su madre, como decíamos, a pesar de que esta declaró a la publicación australiana Who Magazine en 2018 que respetaba totalmente las decisiones de sus hijos (después de Bella, ella y Tom Cruise adoptaron también a Connor, que nació en 1995) y que siempre guardaría amor para ellos, a pesar de todo. Cuando Bella se casó con su marido ni siquiera invitó a la actriz al evento.
El distanciamiento entre Nicole Kidman y Bella y Connor Cruise se propició después del divorcio de la pareja. Unos años antes ya la actriz había decidido dejar de practicar la cienciología, mientras que el actor y los hijos de ambos seguían formando parte de la Iglesia, por lo que cuando llegó el momento de tomar caminos separados, los pequeños se quedaron del lado de su padre.
Como seguramente sepas, todo lo que rodea a esta confesión es un poco oscuro, así que no es de extrañar. De hecho, cuando se produjo el divorcio la intérprete hawaiana, que no australiana, tuvo que firmar una cláusula de confidencialidad, es decir, nunca podrá airear los más y los menos de su separación ni de su relación.
Fotos | @bellakidmancruise
En Trendencias | Ni contigo ni sin ti: ese chico que aparece y desaparece, ¿te está haciendo breadcrumbing?
Ver 0 comentarios