Ya vimos en los Globos de Oro 2012 que el rey de los vestidos sigue siendo el vestido de corte sirena. Pero poco a poco, los cut out dresses se van haciendo un hueco en las alfombras rojas. Consiste en un vestido sencillo (abstenerse estampados) con cortes en lugares estratégicos, que suelen ser en la cadera o en la parte del vientre.
Tanto Ginnifer Goodwin como Emma Robers apostaron por el cut out dress para acudir a la gala del MET. El vestido verde esperanza de Ginnifer es de Topshop y el vestido en blanco crudo con escote asimétrico de Emma, es de Michael Kors.
El Roksanda Ilincic que llevó Keira Knightley en el estreno de “A Dangerous Method” es otra versión del cut out dress. En estos, el corte se sitúa en el vientre y no en los laterales. También existe la posibilidad de sumar a los cortes otras tendencias como el escote corazón y la abertura de la pierna, como el Dolce & Gabbana de Selena Gómez en los Billboard.
La opción por la que han optado Nicole Richie y Leighton Meester es la más común: vestido largo en negro y añadiéndole en la parte de arriba el toque en piel.
Aunque si debemos coronar a alguna celebrity como reina del cut out dress esa sería sin ninguna duda Rooney Mara. En la gira promocional de Millenium le hemos podido ver con varios vestidos de este tipo.
Al ser una tendencia muy difícil de llevar, algunas optan por otros modelos en los que no se enseña tanto, o se enseñan otras partes menos peliagudas. Ese es el caso de Blake Lively y Kate Bosworth.
Fotos | Getty
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