Marrakech se ha convertido en el epicentro de la moda durante estos últimos dos días. Dior ha celebrado allí su desfile crucero y nosotros todavía estamos alucinando con todo el montaje, los sitios que han visitado y la espectacularidad de cada cosa que hemos podido ver a través de redes sociales. Si, eso es lo que tienen hoy en día las redes sociales, puedes viajar a un lugar y a un evento sin necesidad de moverte de tu ciudad. Pero no os podéis perder detalle de toda la lujosa agenda de la que han podido disfrutar algunos periodistas especializados, celebrities e influencers.
Cena de bienvenida
Los invitados a este estupendo viaje tuvieron un gran recibimiento, una cena de bienvenida en el Palais Bahía en la que todos los detalles estaban más que cuidado. Vajilla con pinturas autóctonas en la que se podía leer Christian Dior o ver los insectos característicos de la casa francesa. Una estructura central en medio del gran patio de color azul Klein con una composición maravillosa de lámparas e incluso servilletas y manteles de un lino rústico maravilloso.
El palacio de Bahía (palacio de la bella, el brillante) data del siglo XIX y consta con ocho hectáreas. Hablamos de una de las obras maestras de la arquitectura marroquí, también uno de los principales monumentos del patrimonio cultural del país y uno de los principales lugares de turismo en Marruecos.
En esta cena también se mostraron diferentes piezas de Dior que los diferentes directores creativos han ido creando a lo largo del tiempo. En concreto nos enamoró ver esta pieza, el abrigo "Marrakech", diseñado por Yves Saint Laurent para Christian Dior en 1960.
El hotel
Selman Marrakech ha acogido a gran parte de los invitados, un hotel de 5 estrellas gran lujo que cuenta con más de 300 habitaciones entre las que se pueden elegir dobles superiores, por 330 euros la noche sin desayuno, hasta una villa por algo más de 1.000 euros la noche. Un espacio único diseñado por Jacques Garcia en el que se muestra la opulencia de un tiempo pasado.
Visitas turísticas
El día del desfile por la mañana pudieron disfrutar de unas visitas turísticas por Jardín Majorelle y el museo de Yves Saint Laurent, El Musée de Yves Saint Laurent cuenta con una espacio 4.000 m2 y una sala de 400 m2 reservados para mostrar una exposición permanente donde se pueden apreciar los diseños de Yves Saint Laurent, a través de la escenografía de Christophe Martin.
Comida pre-desfile
Y tras una intensa mañana visitando todos los rincones de Marrakech que tienen la esencia de Yves Saint Laurent, presente en la casa Dior desde 1955 hasta 1960, pudieron disfrutar de un almuerzo en Villa Addi. Este lugar, donde se celebran bodas y eventos privados, se convirtió en el mejor entorno gracias a sus cientos de altísimas palmeras.
La decoración del desfile
El montaje del desfile fue uno de los más especiales e impresionantes que hemos visto nunca. Tuvo lugar en el Palais Badi, más concretamente a orillas de un espectacular estanque central lleno de velas. En los alrededores la pasarela se conformaba de alfombras marroquíes de diferentes colores y estilos. Una vez más Bureau Betak fueron los encargados de este espectacular montaje
Fotos | Dior Wikimedia Commons
