Céline Otoño-Invierno 2012/2013: una temporada amplia y eléctrica

Frente a la posible cancelación por un embarazo avanzado, Phoebe Philo prefirió reducir su desfile a dos escasos pases de unas 30 personas cada uno. Recomendación de no hacer fotos para difundir por las redes sociales y un ambiente en petit comité para ver lo nuevo de Céline por el cual a buen seguro cada vez irán optando más firmas.

La colección vuelve a aunar con buen gusto la visión femenina y masculina de la moda en escasos 30 looks dados a conocer. 30 ideas que reiteran el escaso protagonismo de las curvas, puesto que eso está lejos de la visión de la diseñadora británica.

Frente al gusto por el blanco puro de la colección verano 2012 y la tristeza apagada de la colección Pre-Fall 2012, Céline opta por un invierno al que hay que incorporar el color, en especial algunos destellos eléctricos, como el azul o el fucsia.

Mi parte favorita de la colección Otoño-Invierno 2012/2013 es la influencia de las composiciones geométricas desde la pintura y la arquitectura cercanas a tales temáticas visuales. Bloques de formas que se dividen entre distintas disposiciones a intercalar. A veces son rayas horizontales más gruesas y otras verticales o diagonales.

El cuero es un básico para Céline. Tanto para los abrigos, cuyas solapas no se libran de ello, como para sus vestidos de manga y cuello largo.

A la amplitud en las propuestas (desde los pantalones a las mangas) se le suman detalles en forma de cremalleras, cierta visión que no está lejos del estilo deportivo, pero que va más allá, con un gusto más modernista en el que aparecen los botines blancos junto a zapatos de salón de generosa punta. El contraste creado frente a las ideas de lo que es estilo. Por más que aprieten los diseñadores esta última barrera seguirá siendo difícil de tirar.